La embajadora emérita de México, Rosario Green Macías (1941-2017) marcó un parteaguas en la historia de la diplomacia nacional, poseía una profunda convicción por la transmisión del conocimiento y fue reconocida en México y en el exterior por sus virtudes y logros en los ámbitos académico, político,
diplomático, así como por su gran compromiso en materia de derechos humanos y defensa de las garantías individuales.
En reconocimiento a su trayectoria, a unos días del lamentable deceso de la diplomática mexicana, el Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques del Senado de la República realizó el análisis “El legado diplomático, académico y político de Rosario Green Macías”, en donde se destacan momentos clave de su trayectoria, marcada por el rompimiento de paradigmas y la transformación de la agenda diplomática de México.
La investigación señala que Green Macías desarrolló su vocación como académica desde diversas palestras, tanto como Directora del Instituto Matías Romero, donde mostró su compromiso en la formación de diplomáticos mexicanos, como en su desempeño al ser catedrática en El Colegio de México, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad Iberoamericana (UIA).
Asimismo, tenía una profunda convicción por la transmisión del conocimiento, por lo que la publicación de libros, ensayos, revistas y documentos de investigación fue de vital relevancia a lo largo de su carrera.
En la arena multilateral, entre 1972 y 1974 Rosario Green fungió como Primera Secretaria de la Misión Permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con sede en Ginebra, Suiza, y durante la administración del Secretario General Boutros Boutros-Ghali (1992-1996) ocupó el cargo de Subsecretaria General para Asuntos Políticos de la ONU (1994-1997), cargo nunca antes desempeñado por un mexicano.
En materia de derechos humanos, en 1990 Rosario Green se convirtió en la primera Secretaria Ejecutiva de la recién creada Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). Su compromiso con la protección de los derechos humanos la llevó a ser una de las redactoras de los Principios de París, documento que constituye la base del funcionamiento de las instituciones nacionales de derechos humanos en el sistema de la Organización de las Naciones Unidas.
En el ámbito diplomático, fungió como Embajadora de México en la República Democrática Alemana (RDA) de 1989 a 1990. Posteriormente se desempeñó como Embajadora de México en Argentina entre 2001 y 2005, estancia que estuvo marcada por una línea de promoción económica, de inversión y negocios entre ambos países.
En su vasta carrera diplomática, se destaca su nombramiento como primer Secretaria de Relaciones Exteriores, cuando el 7 de enero de 1998, el entonces Presidente Ernesto Zedillo Ponce de León, la designó para ocupar esta dependencia del gobierno federal.
Como Canciller, Green Macías se ocupó de la negociación del Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación con la Unión Europea, al tiempo que se encargó de ofrecer la visión de México sobre el tema de derechos humanos ante la Comisión Europea y el Parlamento Europeo.
También fue senadora del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en las LVII, LX y LXI Legislaturas. Su trabajo dentro del Senado fue ampliamente reconocido, especialmente por su contribución al mejoramiento del marco jurídico mexicano en materia de tratados internacionales y acuerdos interinstitucionales.
Rosario Green no solo fue testigo de los grandes momentos que determinaron el rumbo de la historia de la segunda mitad del siglo XX, sino que fue su partícipe y protagonista de estos hechos.