Organismos Internacionales como la OCDE, FMI, el Banco Mundial han previsto un crecimiento económico para México de entre 3.0 y 3.8% para el próximo 2014, a partir de la percepción que se ha generado en el entorno internacional sobre la concreción de las reformas estructurales, que motivarían nuevas inversiones y dinamizarán la
economía, afirman economistas y consultores.
Después de haber enfrentado un año difícil tanto por factores externos como por el propio desempeño de nuestra economía, por problemas económicos que nuestro país viene arrastrando desde hace varios años y por haber sido un año de transición política, los analistas afirman que México está transitando por el camino correcto, realizando reformas que aunque difíciles, ya comenzarán a mostrar resultados.
“La economía internacional da signos de recuperación y sin duda beneficia a las economías emergentes como México”, indica un reporte de la OCDE.
Asimismo el BM prevé que las finanzas públicas se verán favorecidas con la entrada en vigor de la nueva Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), que acotará los tratamientos especiales permitiendo una contribución más eficiente.
Asimismo indican que entre los efectos de la Reforma Hacendaria que se harán presentes en 20145, también pueden mencionarse que las empresas pagarán 10% más de impuesto sobre los dividendos que distribuyan a sus accionistas, así como la eliminación a la deducción inmediata, contribuyendo en la competitividad y productividad de las empresas para poder absorber la mayor carga fiscal que tendrán.
Se espera entonces, una mayor ejecución del gasto en inversión pública, la consecuente reactivación del sector construcción y la entrada en vigor de las nuevas reglas para el sector vivienda, dinamizándolo. Esta prevista también la continuidad de la estabilidad macroeconómica que caracterizó a México este año, con bajos niveles de inflación y una mayor ocupación poblacional impulsada por las medidas tendientes a la formalización del empleo.
A nivel externo, el crecimiento económico de Estados Unidos también será un factor favorable para la economía mexicana, por lo que se espera una mayor demanda externa que impulse la productividad y el comercio de nuestro país, en el sector financiero se verá reflejado, pues para 2014 se tiene previsto un tipo de cambio de 12.54, según el Banco de México,
Bajo esta perspectiva, de lo que podemos estar seguros es de que el crecimiento económico en 2014 deberá estar asociado a la productividad, al fortalecimiento del aparato exportador y a la consolidación del mercado interno, dejando atrás las prácticas que han demostrado escasos resultados para tal fin; las reformas concretadas este año marcaron la pauta para lograr estos objetivos, esperamos un año en el que las acciones sigan por el camino trazado.
REFORMAS DEBEN MEJORAR ECONOMÍA DE CIUDADANOS
Las reformas estructurales aprobadas propiciarán crecimiento e inversiones en México, pero sus beneficios deberán reflejarse en el bolsillo de los mexicanos, consideró el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
El nuevo presidente del organismo, Daniel Calleja Pinedo, calificó como de "claroscuros" el desempeño de la economía mexicana en 2013, pues creció muy por debajo de lo estimado, pero se aprobaron las principales reformas económicas postergadas por 15 años.
No obstante, subrayó, "haríamos mal si echáramos las campanas al vuelo" por la sola aprobación de estas reformas, pues lo importante es que estas medidas mejoren la calidad de vida de la sociedad.
Propuso además realizar los ajustes necesarios al Pacto por México, firmado en diciembre de 2012 entre el Ejecutivo y los principales partidos políticos, para que continúe y retome las "batallas" pendientes del país, entre ellas la desigualdad existente.
El directivo consideró que 2013 fue un año de "claroscuros", pues la economía crecerá sólo 1.2 por ciento, muy por debajo de la estimación del gobierno de 3.5 por ciento, debido al aplazamiento del gasto público en el primer semestre, la crisis del sector de la construcción y el débil desempeño de Estados Unidos.
La parte positiva, consideró, es que después de un "impasse" de 15 años se llevaron a cabo las principales reformas económicas estructurales, gracias al Pacto por México entre el Ejecutivo y los principales partidos políticos, el cual creó un ambiente para aprobar los cambios posibles.
No obstante para el nuevo presidente del IMEF, es necesario que las políticas públicas estén alineadas hacia un objetivo común, que es el que se propicie crecimiento en la economía mexicana.
Recordó que la reforma hacendaria aprobada no dejó muy a gusto al sector empresarial ni a la sociedad en general, pues no eleva la base tributaria como se esperaba, por lo que podría retomarse el tema en los próximos años y corregirla.
La reforma energética, continuó, no dará beneficios inmediatos ya que hasta 2015 podría verse una baja en los precios de este sector, pues primero hay que aterrizar las leyes secundarias respectivas que atraerán, por ejemplo, la inversión extranjera.
Comentó que aunque con el paso de los meses se fue diluyendo el "mexican moment" que se presentó con el inicio de la administración federal, éste ha regresado tras la aprobación de las reformas estructurales, las cuales influyen en el ánimo de la comunidad financiera e inversionistas extranjeros.