En el caso de los muertos y desaparecidos de Ayotzinapa, no sólo están en riesgo las organizaciones políticas, sino a prueba las instituciones del Estado, de tal manera que son éstas las que deben dar garantías de seguridad al pueblo de México y no buscar salidas falsas al caso de Iguala, como la desaparición de poderes en Guerrero, afirmó el presidente de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles Conejo.
Consideró que es obligación del Estado mexicano resolver el conflicto suscitado en ese municipio, así como dar certeza a los ciudadanos de que se puede superar la crisis de seguridad que acontece en algunas regiones del país.
Aureoles Conejo mostró su confianza en que se hará valer el Estado de derecho: “Creo en la ley, y hoy considero que están a prueba las instituciones, por lo tanto, creo que es deber de éstas encontrar a los desaparecidos”, subrayó.
El legislador michoacano mencionó que es poco viable la propuesta de quienes quieren desaparecer los poderes, toda vez que no es momento para sacar provecho político de un asunto que le compete a las instituciones nacionales.
“Más allá de coyunturas políticas o debates, posturas ideológicas, voces que aprovechan la confusión y la coyuntura; más allá de eso, hoy están a prueba las instituciones del Estado mexicano. No es momento de proponer salidas fáciles”, insistió.
“Ya no es solamente un asunto de Iguala o de Guerrero, las instituciones del Estado mexicano, incluido el gobierno de Guerrero, tienen que dar resultados en este tema. Antes de proponer salidas fáciles, hoy la prioridad debe ser encontrar a los normalistas desparecidos”, agregó.
Señaló que la situación de violencia e inseguridad que acontece en varias partes del país, son el reflejo de una crisis general en donde se observa un claro debilitamiento de las instituciones del municipio y algunos estados.
Aureoles consideró que esto es generado por una tendencia a retroceder a la idea del centralismo, lo cual “lejos de resolver el problema, lo va a agudizar o ya está grave de por sí y, en consecuencia, la ruta que se va siguiendo la veo muy riesgosa porque, al paso que vamos, esto será muy pronto el retorno al Porfiriato”.
Dijo por ello que es el momento de revisar de fondo el funcionamiento del municipio y las entidades. Hay que iniciar de nuevo, hay que revisar qué está pasando con el tema de las instituciones, abundó.
“Es el momento de un nuevo comienzo, porque es reflejo ahora de una profunda debilidad institucional que en 20 años que lleva este precepto en la Constitución y los municipios siguen igual o más débiles, porque no han podido cumplir su función y lo mismo las entidades de la República”.