El consorcio conformado por las empresas mexicanas Constructora y Edificadora GIA+A (GIA), Promotora y Desarrolladora Mexicana (PRODEMEX) y Constructora TEYA, así como las firmas paraestatales China Railway Construction Corporation (CRCC) y CSR Corporation Limited, además de la francesa SYSTRA, serán los encargados de construir, equipar y operar el Tren de Alta Velocidad (TAV) México – Querétaro.
Lo anterior de acuerdo al fallo del concurso emitido este lunes por parte del gobierno mexicano a través de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes (SCT), lo que garantizará que la obra quede concluida en el segundo semestre de 2017 e iniciando pruebas de operación en el 1er trimestre de 2018, para conectar a la Ciudad de México con la capital queretana en un tiempo de traslado de 58 minutos.
“Sin duda alguna estamos frente a lo que será un proyecto que marque la entrada de México al mundo de los trenes de alta velocidad, además de representar el primero de su clase en el continente Americano, lo que sin duda será un revulsivo para el sector ferroviario nacional”, comentó Pablo Puig, representante del consorcio ganador.
La propuesta del consorcio ganador incluye la operación y el mantenimiento del TAV por cinco años, además de un financiamiento por parte del China Exim Bank de 20 años hasta por el 85% del monto del contrato, con un tipo de cambio de 13.41 pesos/dólar, bajo un plazo de 20 años, 2.5 años de gracia y una tasa de interés fija de 3.22%, condiciones que representan para el gobierno mexicano un ahorro cercano a los 2 mil millones de pesos con relación a las condiciones normales de fondeo del gobierno actualmente.
Además, la propuesta fija un monto de 50 mil 820 millones 264 mil pesos para elaborar el proyecto ejecutivo, construir la obra civil y electromecánica, la procura de los trenes y sus sistemas, así como para operar y dar mantenimiento por cinco años al tren.
Las obras de construcción del Tren de Alta Velocidad México – Querétaro el cual representará el cuarto tren que está en proceso de construcción en el país, iniciará su edificación en enero próximo y comprenderá 210 kilómetros de los cuales 182 se recorrerán a nivel superficial, 16 en viaductos ferroviarios y 12 en túneles para cumplir con el recorrido, mismo que considera 55 puentes.
Durante su construcción la obra del TAV generará 20 mil empleos directos y hasta 41 mil indirectos, además se estima que ya en operación transporte diariamente a 27 mil pasajeros y beneficie a más de 25 millones de personas.
Asimismo, el nuevo tren logrará reducir las 95 mil toneladas de bióxido de carbono vertidas al medio ambiente gracias a sacar de circulación alrededor de 18 mil vehículos que actualmente utilizan dicha carretera, sumado a que descongestionará el tráfico en la misma.
“El consorcio está comprometido con este proyecto como un hito histórico en nuestro país, mismo que contará con los sistemas, infraestructura y tecnología de punta, garantizando en todo momento la seguridad y operatividad del mismo; lo cual se verá reflejado en beneficio de los mexicanos, así como en el desarrollo y reconocimiento de los trenes de pasajeros en México”, concluyó el representante del consorcio ganador.