El estudio ´La migración femenina y el ingreso de México por remesas´, revela que en los últimos años aumentó el porcentaje de mujeres mexicanas en la población migrante en Estados Unidos, cuya participación pasó de 44.1 por ciento en 2007 a 47.1 por ciento en 2013.
El coordinador general del Sector Real y del Programa de Principios Generales de Remesas del CEMLA, Jesús Cervantes, informó que en 2013 las mujeres participaron con 27.3 por ciento de las remesas electrónicas enviadas a México y con 26 por ciento del total de remesas que recibió el país.
En la presentación del estudio, destacó de los beneficiarios en México, las mujeres también son las que reciben el mayor monto, con 67.9 por ciento de las remesas electrónicas y 64.8 por ciento del ingreso total del país por remesas.
El director general del CEMLA, Fernando Tenjo Galarza, señaló que si bien en México representan una proporción relativamente reducida del Producto Interno Bruto, con entre 1.5 y 2.0 por ciento al año, en algunos estados pueden llegar a ser entre 7.0 y 9.0 por ciento del PIB estatal correspondiente.
El estudio, elaborado conjuntamente por el CEMLA, Banorte y el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Grupo Banco Interamericano de Desarrollo (BID), reconoce que hay millones de mexicanas que han emigrado al exterior y cada año envían miles de millones de dólares a sus familiares.
El estudio se centra en la migración mexicana femenina hacia Estados Unidos y las remesas que provienen de ahí, pues en 2013 ese país representó el destino de 97.8 por ciento de la migración mexicana y un porcentaje similar del ingreso de México por remesas, además fue el destino de 97.5 por ciento de la migración mexicana femenina.
Sobre la participación de la mujer en el flujo migratorio mexicano, refiere que en 2013 en Estados Unidos el número total de inmigrantes mexicanos fue de 11 millones 584 mil 977 personas y se integró por seis millones 133 mil 744 hombres y cinco millones 451 mil 233 mujeres.
Indicó que los mexicanos constituyeron el principal grupo migratorio al representar 28 por ciento del total de inmigrantes, 30.4 por ciento de los de género masculino; y 25.8 por ciento de los femeninos.
Señala que en los últimos años en Estados Unidos ha aumentado el porcentaje de mujeres en la población inmigrante y en el caso de total de inmigrantes mexicanos en ese país la participación de las mujeres se elevó de 44.1 por ciento en 2007 a 47.1 por ciento en 2013.
El reporte precisa que durante el periodo 2007-2013, el flujo migratorio mexicano hacia Estados Unidos se frenó de manera considerable y, de hecho, en términos netos fue negativo.
Cervantes explicó que esto obedeció a factores como que en primeros años de ese periodo la economía estadounidense se caracterizó por una elevada tasa de desempleo que desalentó el flujo migratorio mexicano.
Además, ese elevado desempleo afectó sobre todo al sector manufacturero y la industria de la construcción, en donde hay una fuerte presencia de migrantes mexicanos, afectó a trabajadores que bajos niveles de escolaridad, como los mexicanos.
Otros factores son el retorno compulsivo o voluntario de migrantes mexicanos por un sentimiento ´antiinmigrante´ en Estados Unidos, así como por un fuerte fortalecimiento del control fronterizo.
Expuso que la disminución neta de inmigrantes en Estados Unidos en ese periodo se derivó de dos efectos: un aumento en el número de mujeres y un descenso en el de hombres, y las cifras disponibles para 2014 sugieren que tal escenario no ha cambiado.
El reporte considera que 98 por ciento de número de remesas electrónicas recibidas por México en 2013 provinieron de Estados Unidos, lo que permite estimar que ese año de los 20 mil 912 millones de dólares que México recibió desde Estados Unidos por remesas electrónicas, cinco mil 700 millones de dólares fueron remitidos por mujeres.
´Esto representó 27.3 por ciento del monto mencionado y 26 por ciento del total de remesas que recibió el país´, abunda sobre la participación de la mujer en el envío de remesas.
De ese ingreso por 20 mil 912 millones de dólares, señala, los beneficiarios en México de 14 mil 197 millones de dólares fueron mujeres, lo que representó 67.9 por ciento del monto de remesas electrónicas y 64.8 por ciento del ingreso total del país por este concepto.
Información de la base de datos de las operaciones de remesas de Banorte revela que de las dos millones 851 mil 859 transferencias de remesas consideradas en 2013, 30.1 por ciento fueron enviadas por mujeres (858 mil 894 envíos), lo que representó 27.2 por ciento del valor total de tales transferencias.
Refiere que tanto en el caso de las remesas enviadas por hombres como por mujeres el principal grupo beneficiario son mujeres, al precisa que en las remesas enviadas por mujeres fueron mujeres las destinatarias de 66.9 por ciento de las transferencias y de 62.9 por ciento de los recursos enviados.
Por su parte, en el caso de las remesas enviadas por hombres las mujeres fueron beneficiarias de 73.8 por ciento del número de envíos y de 69.1 por ciento de los recursos remitidos.
No obstante, en general, las remesas que envían las mujeres a México son de menor monto que las que mandan los hombres, independientemente del género del destinatario.
En la base de datos de Banorte la remesa promedio enviada (y recibida) se ubicó en cinco mil 980 pesos (468 dólares), pero resultó de cinco 391 pesos (422 dólares) en las enviadas por mujeres y seis mil 230 pesos (488 dólares) en las que mandaron los hombres.
De esta manera, las remesas enviadas por los hombres superaron en cerca de 20 por ciento a 25 por ciento a las enviadas por mujeres.
El reporte conjunto del CEMLA, Banorte y FOMIN revela que en México, el principal grupo receptor de remesas son los padres, pues sus hijos migrantes les envían el mayor monto por este concepto, superando lo que reciben esposas e hijos, aunque la frecuencia de la recepción de recursos es mayor en el último grupo.
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo de Banorte USA, Alberto Raúl Guerra, destacó los más de 22 mil millones de dólares que recibe México en remesas es un monto importante para la economía nacional y los millones de personas y familias que reciben de estos recursos
Señaló que para Banorte la mejor forma de recibir una remesa es no tener que ir a cobrarla a un lugar específico, sino recibirla directamente en un instrumento financiero o cuenta bancaria, para que los usuarios puedan hacer un uso más eficiente de sus recursos.
Indicó que en 2014, Banorte pagó casi cinco millones de remesas familiares, tiene una participación en este mercado de 13 por ciento, más de 20 por ciento de las remesas que recibió llegaron directamente a una cuenta bancaria, lo que representa 10 veces más respecto a las de hace una década.
Con ello, resaltó Guerra, la institución financiera contribuye al proceso de inclusión financiera del país, lo que significa acercar y prestar los servicios financieros a más mexicanos