La economía mexicana está pasando un “pequeño bache”, debido a débiles condiciones externas, pero también por determinantes internas, consideró BofA Merrill Lynch Global Research (BofAML). El economista en Jefe para México del BofAML, Carlos Capistrán, señaló que este bache económico obedece a que la producción industrial permanece sin cambios, y a que las exportaciones y las ventas al menudeo fueron negativas en febrero pasado, entre otros. “Desde nuestro punto de vista, esto es parte del pequeño bache por el que actualmente pasa México”, añadió en el análisis incluido en su Semanario de Economía Global de la institución financiera.
Explicó que parte de esto se debe a las débiles condiciones externas, pues la producción industrial ha sido relativamente débil en Estados Unidos desde el segundo semestre de 2012, lo que ha afectado a las exportaciones mexicanas y a la producción industrial con un rezago.
Además, la incertidumbre en cuanto a la situación fiscal de Estados Unidos el año pasado y las elecciones en dicho país, así como el actual “shock fiscal” y el elevado desempleo en el sector de la construcción han impactado negativamente en las remesas.
Capistrán comentó que dada su importancia para el consumo en México, esto está comenzando a afectar a indicadores como las ventas al menudeo.
Según las previsiones de BofAML, la economía de Estados Unidos se recuperará y tendrá un 2014 fuerte, con un crecimiento de 2.6 por ciento, además el mercado de vivienda tendrá una fuerte recuperación, lo que aumentará el empleo en el sector.
Asimismo, anticipa que ambos avances ayudarían a las exportaciones mexicanas, la producción industrial y las remesas, y previó que esto suceda a partir de la segunda mitad del año y hacia 2014.
El especialista de BofAML sostuvo que parte de este “pequeño bache económico” por el que atraviesa México también tiene determinantes internas.
Refirió que el sector de la construcción ha tenido dificultades debido al cambio de administración y el retraso relacionado con los pagos y contratos, el cambio en el modelo de vivienda del futuro, hacia desarrollos verticales en vez de horizontales, también afecta al sector.
“Un efecto de base debido a las elecciones federales del año pasado juega también un papel importante. Sin embargo, prevemos que lo anterior sea temporal”, agregó.
Apuntó que para 2014, cuando el gobierno federal obtenga los recursos de la reforma fiscal que esperamos, la inversión en infraestructura debería aumentar y ayudar al sector de la construcción.