En contraste con el optimismo de la Secretaría de Hacienda, analistas privados consultados por el Banco de México recortaron a 2.64% desde 2.84%, su pronóstico de crecimiento para el 2013.
En cuanto a la previsión para el 2014, los resultados de la encuesta refieren que el PIB alcanzará el 3.98 por ciento.
En sus expectativas sobre el comportamiento de la inflación, los especialistas consultados por el banco central estiman una baja a 3.64% desde el 3.79% de junio, mientras que para el próximo año la ubica en 3.81 por ciento.
En lo referente al tipo de cambio, la visión de los analistas aumentó a 12.65 pesos desde 12.59 pesos que se dictó en la encuesta previa.
Para el cierre de 2014, los pronósticos correspondientes se mantuvieron constantes con respecto al estudio precedente, es decir, en 12.48 pesos.
Con relación al nivel de la tasa de interés del Certificado de la Tesorería de la Federación (Cete) a 28 días, los pronósticos de la encuesta de julio para el cierre de 2013 subieron ligeramente a 3.9% respecto a 3.86%, lo mismo que para 2014, a 4.19% desde 4.08 por ciento.
La variación prevista por los analistas en cuanto al número de trabajadores asegurados en el IMSS al cierre de 2013 disminuyó a 536,000 nuevas plazas respecto a las 579,000 calculadas el mes previo.
Para 2014, los especialistas consultados por el Banxico estimaron una creación de 697,000 nuevos empleos formales, contra 710 mil previsto el mes anterior.
A su vez, la expectativa sobre la tasa de desocupación nacional para 2013 se elevó a 4.71% desde 4.61% el mes anterior, y para el año próximo aumentó a 4.45% respecto a 4.41%.
Los especialistas consideran que los principales factores que afectarán el desarrollo de la economía son la debilidad del mercado externo y la economía mundial, la inestabilidad financiera internacional; los problemas de inseguridad pública; y, la ausencia de cambio estructural en México.
La víspera, la Secretaría de Hacienda en voz del encargado de la Unidad de Planeación Económica, Ernesto Revilla, admitió que la economía crece a un menor ritmo, aunque mantuvo su meta de 3.1% para el cierre del año al señalar que no existen elementos contundentes para cambiar el pronóstico.