“Para los más de 150 mil personas que habitan las 75 comunidades de Jalpa de Méndez y Nacajuca, ya no estamos en una supuesta mesa de diálogo con Pemex porque solo miente, por lo cual, iniciaremos movilizaciones, manifestaciones y exigimos a la paraestatal, que retire su infraestructura de nuestras comunidades, pues en caso contrario, cerraremos los 108 pozos activos
que existen para que entiendan, que nosotros no jugamos”, señaló el delegado de Mazeatupa, José Dolores de la Cruz.
Al ofrecer una rueda de prensa en las instalaciones de la biblioteca legislativa y en presencia de la diputada local del PRD, Verónica Pérez Rojas, establecieron que ya no más engaños, y por ello, ya no dejaran trabajar a la empresa y filiales en sus comunidades.
Es por ello, que exigen a PEMEX que salga de los municipios de Jalpa de Méndez y Nacajuca, donde los delegados de 75 comunidades advirtieron que no permitirán la entrada de vehículos ni personal de la paraestatal, en respuesta a la cerrazón que hay de esta empresa por reconocer afectaciones graves que en dichas demarcaciones.
José Dolores de la Cruz, al leer un comunicado, exigió a Pemex el cese de sus operaciones y el retiro de maquinarias de esta zona. Dijo que de no ser así “se harán acciones en contra de 108 pozos petroleros en producción, como es el cierre de caminos a estos lugares”.
De la misma manera, manifestó que defenderán esta tierra hasta lograr que Pemex y las empresas trasnacionales dejen de saquear la riqueza de los pueblos indígenas. “Urgimos a Pemex a retirarse de nuestras comunidades a que saquen su equipo de destrucción y muerte, y se vayan a seguir haciendo lo que bien saben hacer y que es destruir la naturaleza y trastocar la paz y tranquilidad de las comunidades a donde llegan ofreciendo espejitos a cambio del oro negro, pero en Nacajuca y Jalpa de Méndez ya no entraran, en este propósito van nuestra vida en prenda”, señaló López de la Cruz.
Y agregó: “Vamos a reescribir la historia con la tinta de nuestra sangre si es preciso, Dios no nos abandonará”. Asimismo, aclaró no se permitirán más humillaciones de funcionarios de Pemex, y mucho menos que sigan dando “atole con el dedo” a las miles de familias afectadas por el impacto petrolero.
En el documento, mencionó que Pemex a través de mandos medios busca minimizar las afectaciones, señalando que no existe manera de corroborar estos daños y mucho menos sustentos legales y jurídicos para solucionar las demandas.
Acusó que la intromisión de los diputados locales Uriel Rivera Ramón y Francisco Javier Cabrera Sandoval, solo han entorpecido las negociaciones, solo con el afán protagónico y político.
Dijo que estos legisladores han negociado incluso a espaldas de las comunidades con obras sociales que no se han visto.
En tanto la legisladora local del PRD, Verónica Pérez Rojas precisó que en ambas demarcaciones habitan 37 mil familias, y son las que estarían pidiendo reglas claras y accesibles para acceder a beneficios que les permita resarcir los daños a la salud, cultivo, pesca, ganadería, ambientales; entre otros.
“Ellos van a tomar acciones pacificas no sabemos cuáles, pero es un ya basta lo que están exigiendo”, sostuvo.