Un grupo de ingenieros de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) diseñaron a través de un proyecto educativo electrodomésticos inteligentes que funcionan con el reconocimiento de voz del usuario.
El profesor de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, Vicente Borja Ramírez, detalló que junto con otros ingenieros realizaron un caso de estudio de experiencia en sistemas por reconocimiento de voz en electrodomésticos, con el diseño centrado en el usuario.
El proyecto se realizó a partir de la colaboración del Centro de Diseño Mecánico e Innovación Tecnológica de la Facultad de Ingeniería de la UNAM con la empresa mexicana Mabe, con la finalidad de desarrollar estudios de exploración de nuevos productos orientados a los consumidores mexicanos.
En entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el científico especificó que el proyecto prospectivo estuvo orientado a mejorar la convivencia de usuarios de forma laboral activos entre los 25 y 35 años que radicarán en la Ciudad de México para 2030.
“Los alumnos exploraron cómo la gente quiere relacionarse con los distintos enseres domésticos de la cocina, que son básicamente refrigeradores, estufas y licuadoras, entre otros”, describió el académico.
Borja mencionó que entre las distintas formas de aprovechar la tecnología en beneficio de los usuarios, destacaron los sistemas por reconocimiento de voz.
Con esto, el ingeniero dijo que desarrollaron la interfaz denominada Ki, conceptualizada para responder preguntas y realizar tareas básicas, como encender o apagar los electrodomésticos, reproductores de música, realizar llamadas telefónicas y enviar mensajes de texto.
“Cuando alguien está preparando un platillo, puede ocurrir que quiera mejorar la receta o que tenga dudas sobre los ingredientes y desee preguntar a alguien, en este sentido, Ki tiene una relación de asistencia con el usuario”, señaló.
El especialista comentó que surgieron dos tendencias importantes del diseño del proyecto, el diseño centrado en el usuario (design thinking) y el diseño centrado en la sustentabilidad.
En el primero, los estudiantes realizaron observaciones directas de los usuarios en el contexto de sus cocinas, con la finalidad de entender las problemáticas que se presentan actualmente y las oportunidades para innovar los productos utilizados.
“Obtuvieron mucha información de primera mano, que iba desde ver qué hacen actualmente las personas hasta probar algunas propuestas y ver cómo reaccionaban los usuarios”, mencionó.
Mientras que como propuesta de interfaz se desarrollaron diversos prototipos de una aplicación que fueron probados por los usuarios a lo largo de 10 meses.
El investigador expuso que en su prototipo final, Ki podía encender y apagar la licuadora, controlar la música y contestar entre tres y cuatro preguntas.
Precisó que contó con una interfaz digital y un micrófono ajustado en un sitio de la cocina simulada en las instalaciones de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, en donde encendía y apagaba la parrilla de inducción y ayudaba a regular la temperatura.
Borja resaltó que recordar al usuario la lista de despensa del supermercado y administrar el consumo de energía de los electrodomésticos son algunas de las actividades que realizará la interfaz en el futuro.