Con la finalidad de ofrecer soluciones basadas en trabajo científico especializado a los sectores público y privado, la Red de Desastres Hidrometeorológicos y
Climáticos (Redesclim), que es parte de las redes temáticas de investigación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), construye un catálogo de servicios para aminorar los efectos de fenómenos meteorológicos en todo el país.
En el marco de su sexta reunión nacional llevada a cabo en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), el investigador del comité técnico académico de la Redesclim, doctor Carlos Manuel Welsh Rodríguez, detalló que el objetivo de este catálogo es fortalecer la interacción con la sociedad civil, gobiernos y empresarios.
“Dado que somos académicos dedicados a temas interdisciplinarios de desastres, los servicios que ofreceremos en este catálogo serán capacitación, a través de cursos y talleres asociados a fenómenos hidrometeorológicos; planes de resiliencia, de acción climática, así como estudios de monitoreo y bases de datos en relación a estos temas. Una parte importante de esta reunión nacional fue identificar sus demandas. Nos acompañaron el responsable de Protección Civil del municipio de Querétaro, así como los delegados de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Queríamos escuchar sus necesidades para ver nuestra capacidad de interactuar con ellos, con nuestros productos y servicios que vamos a desarrollar”.
Esta red la integran especialistas en hidrología superficial, climatología, ciencias sociales, meteorología, sociología, economía, entre otras, con el objetivo de analizar los fenómenos meteorológicos y sus efectos que, advirtió, se han incrementado en los últimos 20 años.
“Ha aumentado el número de eventos y su intensidad, particularmente los huracanes en las dos costas del país. Eso significa que estamos ante amenazas más fuertes, y en la construcción social del riesgo tenemos que trabajar para reducir sus efectos”.
Al respecto, el miembro del comité técnico académico de la Redesclim y representante de la Facultad de Ingeniería de la UAQ, Enrique González Sosa, puntualizó que la red persigue ofrecer soluciones soportadas en conocimiento científico a los tomadores de decisiones, bajo cinco líneas temáticas básicas: monitoreo, bases de datos y diseminación de información; pronósticos meteorológicos y prevención de desastres; diagnóstico y análisis de procesos; modelización climática y análisis de procesos físicos, así como políticas públicas y estrategias de comunicación.
“México, por su posición geográfica, es afectado de manera constante por diferentes fenómenos meteorológicos; la inversión que se hace respecto a los daños se ha incrementado al doble, se ha pasado de los cinco mil a los 10 mil millones de pesos y la recurrencia es mayor. El cambio climático apenas comienza, por lo que se carece de información o registros necesarios sobre su evolución, además, debemos tomar en cuenta la dinámica de la población y cambios de superficies, lo que genera que las ciudades crezcan junto con los daños”.
Explicó que en el caso de la ciudad de Querétaro, las condiciones naturales y urbanas la hacen propensa a inundaciones, por lo que el trabajo debe orientarse en aminorar los riesgos y no solamente en el desalojo del agua.
“Cuando se modifican las condiciones naturales de escurrimiento favorecemos las inundaciones. En condiciones naturales, los ríos buscan el camino menos difícil, por eso hay meandros. Lo que se ha hecho en estos años son líneas rectas que aceleran el caudal y, por el volumen de agua, se desbordan, provocando los desastres que todos conocemos. Por eso, lo que planteamos es reponer las condiciones anteriores, para que el escurrimiento sea más lento y disminuya esa energía del agua”.