La compañía automotriz Volvo presentó hoy el primer sistema de detección de ciclistas en el mundo, con el que equipará a sus vehículos para prevenir que se vean implicados en accidentes fatales.
La firma sueca continúa avanzando hacia su meta global de “cero accidentes” en sus vehículos hacia al año 2020, por ello desarrolló una tecnología que frenará de manera automática a sus automóviles cuando circulen cerca de ciclistas.
Volvo explicó que la tecnología utiliza información de una unidad de radar en la parrilla del vehículo y una cámara delante del espejo retrovisor interior para evaluar posibles colisiones.
Si se detecta un impacto inminente, emitirá un destello rojo de advertencia y sonará una alarma, al tiempo que activará en automático el sistema de frenado del vehículo, que lo detendrá completa y repentinamente sin la intervención del conductor.
Este sistema trabajará junto con el detección de peatones, introducido en 2010.
Según el fabricante sueco, cerca de la mitad de las muertes de ciclistas europeos han sido causadas por colisión con un coche, por lo que espera que este sistema de detección de ciclistas contribuya a reducir esas cifras.
La tecnología, presentada en el Salón de Automóvil de Ginebra, es lo suficientemente inteligente como para diferenciar entre ciclistas, peatones y vehículos cercanos.
Sin embargo, el nuevo sistema no es el reemplazo de precaución al volante, así que recomendó a los conductores mantener la prudencia.