La compañía de teatro Ocho metros cúbicos inicia una residencia en el Museo Universitario del Chopo, donde presentarán una mini temporada de su repertorio completo a partir de este fin de semana, además del estreno del montaje “Esto no es Dinamarca”, hacia finales
de julio.
Dicha estancia artística se inscribe en el marco de la celebración de su sexto año de vida que, de hecho, coincide con el 40 aniversario del recinto universitario.
Al respecto, el director de la compañía, David Jiménez Sánchez, comentó a Notimex que significa una gran oportunidad para presentar su propuesta artística en esta ciudad y hacer una revisión de cómo ha evolucionado la compañía en cuanto a su lenguaje estético.
El recorrido comenzará el jueves 21 con cuatro funciones consecutivas de la puesta en escena “Disertaciones sobre un charco”, una comedia de enredos escrita por Edgar Chías, que narra las aventuras de cuatro jóvenes editores de una revista de carácter religioso que, en algún momento, deciden cambiar el sentido de una sentencia divina, lo que les ocasionará problemas.
Para inculpar a alguien, deciden inventar la intromisión de un “hacker” en sus sistemas, al cual llaman Martirio Lampeduza, personaje que va creciendo como héroe mientras que sus inventores se enredan cada vez más en sus errores.
En palabras de Jiménez Sánchez, este montaje es “una crítica a través del juego de las redes sociales y cómo podemos hablar de manera más clara cuando no lo hacemos a nuestro nombre”, señaló.
Todas las obras que presentará Ocho metros cúbicos hasta principios de agosto en el Museo Universitario del Chopo son escritas, dirigidas y producidas por sus propios integrantes, por lo cual se consideran un grupo autogestivo.
“En este compañía, el convenio es que cada quien escribirá lo que tenga que escribir y todos como grupo le entraremos, todos estamos muy inmersos en el proceso”, comentó.
El jueves 28, sábado 30 y domingo 1, el público podrá ver en escena “El camino del insecto”, obra de teatro que enlaza temas vigentes de la realidad mexicana: la política, el fútbol y la muerte, en un entramado ficticio que invita a reflexionar sobre la relación que tienen los acontecimientos políticos que casualmente se entretejen con el fanatismo pambolero.
La historia fue escrita por David Gaitán y se desarrolla en un contexto futurista en el que simultáneamente suceden los comicios electorales y la Copa Mundial de Futbol, justo cuando la selección nacional está a punto de ganar el campeonato, de manera inexplicable, el portero queda ciego.
Como si fuera poco, en ese preciso momento intentan asesinar al candidato a la presidencia que representaba la esperanza de un cambio para los ciudadanos.
El futbol y la política son dos temas de interés común para los cuatro integrantes de Ocho metros cúbicos, David Jiménez, David Gaitán, Edgar Chías y Raúl Villegas, ésta y otras situaciones detonan el interés particular de sus miembros para después ser reconstruido en una propuesta teatral única de carácter socialmente reflexivo.
“Hablamos de lo que nos interesa sobre nuestro alrededor, será muy difícil que una obra de teatro no tenga un contenido de crítica social, desde nuestro punto de vista, lo dejamos abierto y nos encanta dialogar con los escuchadores”, apuntó al respecto el director.
“Venimos a ver a nuestros amigos ganar” se presentará el viernes 6, sábado 7 y domingo 8 de mayo; en esta pieza escénica se realiza una revisión histórica y actual sobre la discriminación racial.
David Jiménez, dramaturgo y director comenta que su inspiración nació de la experiencia con el grupo de investigadores de ciencias genómicas en la Universidad de Emory, en Atlanta, Estados Unidos, durante el 2012, cuando surgió la premisa de que la genética mal interpretada puede representar una nueva forma de discriminación.
El jueves 28, viernes 29 y sábado 30 de julio se estrenará “Esto no es Dinamarca”, obra escrita por Edgar Chías, en la que propone una adaptación de la tragedia de Hamlet a la realidad mexicana.
Jiménez Sánchez explicó que la pieza brota de las fisuras del texto original de Shakespeare y la sociedad que describió alrededor del drama, derivando en encuentros impregnados de la particularidad de lo mexicano.
Además apunta que hasta el momento es la obra más ambiciosa en la que ha trabajado la compañía, porque incluye más actores en escena, lo cual aumentó el nivel de producción y creció el de creatividad.
Al escenario se suman Andrea Celeste Padilla, Margarita Lozano y Fernando Aragón, y todas las obras tienen el diseño de vestuario, iluminación y escenografía por Raúl Castillo, detalló.
“Esto no es Dinamarca” destaca también porque pondera una intervención arquitectónica, es decir, está diseñada y producida según un estándar de Ocho metros cúbicos para presentarse en escenarios no convencionales, en este caso en uno de los perfiles del edificio interior del Museo Universitario del Chopo y no en el Foro Dinosaurio, como las anteriores.
Como compañía, Ocho metros cúbicos se presentó por primera vez en la XXX Muestra Nacional de Teatro, realizada en Culiacán, Sinaloa en el 2009, a partir de ahí han ido experimentando para desarrollar un lenguaje escénico propio.
Como director teatro, lo que Jiménez Sánchez considera más valioso es mostrar que con la “manipulación de todos los componentes escénicos, es decir, no sólo el actor, el espacio, la luz, podemos crear un universo que es congruente consigo mismo”.