En esta obra, Sabina Berman nos presenta una ficción basada en la compleja
personalidad del poeta portugués Fernando Pessoa.
¿Somos uno solo? ¿Nos conformamos como una unidad? ¿Lo que mostramos a los demás es nuestra “verdadera” personalidad? ¿O por el contrario se trata de máscaras resguardadas en nuestra psique que se muestran de manera aleatoria? ¿Qué conforma y resguarda en sus recovecos nuestro pensamiento? Estas son algunas preguntas que bien podría detonar la puesta en escena de “Ejercicios Fantásticos del yo”, una pieza teatral escrita y dirigida por la dramaturga mexicana Sabina Berman.
En esta obra, Berman nos presenta una ficción basada en la compleja personalidad del poeta portugués Fernando Pessoa (1888-1935) y su trabajo literario producido bajo variados e interesantes heterónimos.
Precisamente, esta multiplicidad de “falsos personajes” o “alteregos” creados por la firma del poeta son el punto de partida de la obra de Berman para exponer la complejidad de aquello que llamamos personalidad, colocando la narrativa y el cuestionamiento sobre el Yo fuera de lo unitario y de los límites de la dicotomía de lo real y lo falso.
La historia se inicia cuando Fernando Pessoa tiene que enfrentarse a múltiples tareas complicadas y decisivas para el rumbo de su vida y que representan para él un reto creativo, literario y amoroso. La obra se desarrolla en Lisboa, capital de Portugal, en medio de un contexto bélico debido al estallido de la Primera Guerra Mundial.
En medio del desgaste que representa atender los diferentes ámbitos de su vida, de la demanda de ser consciente de la realidad, de experimentar el amor y de responder al llamado creativo como poeta, el espectador ve emerger una multiplicidad de yoes de Fernando Pessoa que superan la treintena.
Cada uno de estos Yo tiene una visión específica del mundo, por lo que cada uno busca imponer el tema de su interés como prioritario a resolver. Los Yo dialogan entre sí, debaten, se cuestionan, se asesinan; son tan diferentes y opuestos que desatan un caos que deja expuesta la locura velada que, al igual que en todos, se alberga en Pessoa.
Lo que vemos en la obra de Berman es un ejercicio dramático que deja desnudos los rincones, deseos y pesadillas más profundas de la mente y nos muestra a la demencia como una posibilidad contenida en nosotros mismos que, lejos de lo que se nos ha hecho creer, está más continua de lo que pensamos.
La obra no tiene un solo protagonista. ¿Quién es el verdadero Pessoa? ¿Cuál deberá ser su destino? ¿Y quién será el encargado de escribir su camino de fatalidad?
Con un gran humor, irreverencia, grandes actuaciones y guiños al contexto social actual en el que vivimos, lo que “Ejercicios fantásticos del Yo” pone en marcha no es en lo absoluto una búsqueda del sí mismo, sino su propio extravío, el fuera de sí, la desintegración y la negación de la indivisibilidad de nuestra mente como principio de nuestra existencia.
Esta puesta en escena, montada primero en Argentina hace unos meses, llega a nuestro país con una corta temporada en el Teatro del Centro Cultural Helénico hasta el 5 de mayo. La obra cuenta con las actuaciones de Moisés Arizmendi, Hernán Del Riego, Nora Huerta, Fernando Bonilla, Alfonso Cárcamo, Sonia Franco, Hamlet Ramírez y Jyasú Torruco.