A nivel mundial, y consecuentemente en México, hoy existen más orquestas que nunca, aseguró el director mexicano José Areán. “Hoy en día hay orquestas en toda Asia: En China, Tailandia, Indonesia, Japón y recientemente se abrió una nueva ópera y sala de conciertos en Beijín”, destacó.
Durante una entrevista el músico nacido en la Ciudad de México dijo ver en toda Latinoamérica una explosión impresionante de orquestas nuevas, y México no es la excepción. “Hoy como nunca antes existen orquestas sinfónicas en casi todos los estados de la República Mexicana”, subrayó Areán.
Reconocido dentro y fuera del país como uno de los directores de orquesta más importantes de la escena mundial actual, el entrevistado añadió que todas esas orquestas han sido profesionalizadas y alcanzado un excelente nivel, “porque la música clásica, sin duda, está teniendo una explosión masiva a nivel mundial”.
Areán, quien conoce una amplia gama de actividades musicales y culturales (la ópera, la música sinfónica, de cámara y cinematográfica, la promoción cultural y la producción música) aclaró: “hay quienes creen que la música sinfónica va decreciendo; lo que sucede es que está poco en los medios de comunicación”.
Recordó que hasta hace relativamente poco tiempo, la música clásica tenía un espacio en los medios, y actualmente, sólo en algunos segmentos culturales y en los canales abiertos, “carencia que es salvada por las redes sociales, que al democratizar la información sustituyen la labor que antes era de los medios”.
Director Asociado de la Orquesta Sinfónica de Minería desde 2005, y director huésped de las más importantes orquestas de México, consideró que muchas personas buscan esos contenidos. “La gente busca a quienes nos dedicamos a la música clásica, por esos medios, por su amor a este género musical”, abundó.
Se debe lamentar, dijo enseguida, que la tendencia a la baja en la información dentro de los medios de comunicación se ha reflejado en la educación primaria. Y comparó: “La educación básica que yo obtuve de niño, era mucho más rica que la que tienen los muchachos hoy en día y eso, sí es realmente de lamentar”.
El entrevistado ha dirigido en Alemania, Austria, Argentina, Estados Unidos, Francia, Holanda y Suiza, y solistas como Philippe Quint, Sarah Chang, Giora Feidman, y Jorge Federico Osorio han concertado bajo su batuta. Con esa vasta experiencia y enorme autoridad en el rubro, elevó la voz para señalar tajante:
“Por ello, los directores en lo particular y las orquestas en su conjunto debemos redoblar nuestros esfuerzos para atraer a las audiencias jóvenes. Por fortuna, en México no tenemos ese problema en niveles graves porque hay una población infantil y joven que asiste regularmente y con mucho gusto a los conciertos”.
Puso en relieve que, en naciones como Estados Unidos, es una crisis porque las nuevas generaciones no tienen conciencia de qué es la música clásica y por lo mismo se preguntan por qué la habrían de consumir. “Uno va a un concierto en ese país y ve puras cabecitas blancas, y eso, es una crisis de gran dimensión”.
Esa actitud del público joven se pone de manifiesto, sobre todo, en las naciones desarrolladas. “En Latinoamérica, y están como ejemplo México, y Venezuela como caso señero en participación de niños y jóvenes como espectadores y como ejecutantes de música, es extraordinario el desarrollo que se ha tenido”.
Por todo lo anterior, el entrevistado considera que los directores como él no se deben limitar a dirigir a las orquestas. “Debemos tener un proyecto sólido, que se refleje en nuestra programación y en nuestras acciones en el terreno de la política cultural”, concluyó José Areán, uno de los directores más dinámicos en este país.