Durante el presente siglo el único procedimiento disponible para tratar el cáncer de mama fue el quirúrgico, pero con la llegada de nuevas terapias y el abordaje multidisciplinario, al anticipar la enfermedad en la mujer, brinda la oportunidad a los especialistas de tratar con nuevas técnicas menos agresivas.
Durante el panel sobre nuevas estrategias para el tratamiento de cáncer de mama, realizado por especialistas en el tema, en el marco de Tijuana Innovadora 2014 “Diáspora mexicana, el talento que voló al norte”, realizado en el teatro del Cecut, los expertos aseguraron que la nuevas técnicas han permitido un avance significativo en el tratamiento del cáncer.
El médico cirujano Horacio Astudillo de la Vega, investigador de la Unidad del Laboratorio de Investigación Trasnacional y Terapia Celular del Centro Médico Nacional Siglo XXI, afirmó que durante los últimos 15 años se han hecho progresos médicos, y el cáncer de mama es una de las enfermedades que más se han estudiado.
Indicó que las clasificaciones de orden molecular han logrado definir los puntos biológicos que permiten redireccionar de manera más específica a la paciente; “es evidente que en los próximos años las alertas y tecnologías que se implementarán tienen un direccionamiento que mejorará la calidad de superviviencia de las pacientes”.
El jefe del Departamento Clínico de Oncología Médica UMAE, Hospital de Gineco-obstetricia CMNO-IMSS, Efraín Salas destacó que ahora se conocen más aspectos histológicos biológicos y moleculares, y sobre todo se ha incursionado en conocer más desde el punto de vista genético del cáncer.
Dijo que aunque en el presente da la impresión de que el comportamiento del cáncer es más agresivo, en décadas pasadas lo era aún más y ahora la diferencia estriba en que se conocen más subtipos de cáncer, así como grupos especiales de riesgos por sus características biológicas y moleculares.
“Ahí es donde uno tiene que ser muy sensato, en ver los tipos específicos de cáncer, las características de cada tipo para poder diseñar estrategias de tratamiento, la parte quirúrgica; es importante tener el diagnóstico de inicio para estudiar las características biológicas y moleculares que nos ayuden a diseñar los tratamientos”, dijo.
Estos, abundó, se deben conformar por equipos integrados en la oncología quirúrgica y por patólogos altamente calificados para hacer subgrupos específicos de cáncer y seleccionar en cada grupo un tipo de tratamiento dirigido de manera personalizada por los subtipos que hoy conocemos.
El oncólogo Gerardo Castorena, autor de numerosos artículos y del primer libro en Latinoamérica dirigido a pacientes de cáncer y sus familiares, refirió que se empleaban procedimientos muy agresivos que incluso despojaban al paciente de su glándula mamaria.
Manifestó que con las modernas técnicas se aprendió que en muchos de los casos la identificación de un solo ganglio les permite a los médicos ser menos agresivos con la axila, pues el cáncer de mama es una enfermedad que se disemina por las vías linfáticas, “se quitaba la glándula mamaria y los ganglios a veces con secuencias peores que la enfermedad”.
Asimismo explicó que con pequeñas cirugías se puede garantizar que la paciente será tratada de manera quirúrgicamente más benigna e incluso cuando hay necesidad de quitar la glándula, se puede dejar la piel para que posteriormente sea posible la reconstrucción del seno por un cirujano plástico.
El ex presidente de la Sociedad Mexicana de Radioterapia y ex director del Hospital de Oncología del IMSS, Juan Ramón Ayala expuso que ahora se analiza la posibilidad de que con los nuevos métodos se lleven a cabo los diagnósticos y tratamientos sobre diseño para asegurar que una persona pueda ser mejor atendida, “pienso que ese es el futuro”.