Son las 11:00 de la mañana en el quirófano híbrido del Hospital General de México (HGM) “Dr. Eduardo Liceaga”. Desde ahí, en tiempo real, se transmite por internet la lección de neurocirugía del doctor Fares Chaddad, quien junto con dos cirujanos, disecan, cortan el cráneo y realizan un complejo procedimiento en el cerebro de una mujer de 73 años.
Desde horas antes, alrededor de las 9 de la mañana, un grupo de 11 médicos y enfermeras en pijamas quirúrgicas preparan el quirófano y monitorean los signos vitales de la paciente que será intervenida. Su diagnóstico: aneurisma cerebral.
La transmisión de la neurocirugía dirigida por el doctor Chadad, de la Universidad de São Paulo, comienza a las 11 de la mañana. Desde una computadora o móvil, cualquier persona en el mundo podrá observar en primer plano los pasos de la intervención.
La cirugía forma parte del programa de educación continua del Hospital General de México, en el que se presentan las técnicas quirúrgicas más avanzadas a los médicos del Sistema Nacional de Salud, a través de transmisiones en vivo en las cuentas de Facebook y Youtube del HGM.
A lo largo de la historia, la medicina ha hecho de la observación una de sus principales herramientas. Las lecciones médicas y la asistencia pública a disecciones se han realizado desde hace mucho tiempo y a lo largo del tiempo. Mucho antes de Vesalio (1514-1564), Herófilo de Calcedonia ya realizaba disecciones en público en Alejandría, allá por el ya en el Siglo III e.c.