· El cáncer infantil representa el 40 % de las enfermedades en edades de 0
a 18 años.
· El diagnóstico precoz es primordial en las posibilidades de tratamiento y curación.
Ciudad de México, a 14 de febrero de 2019.- Según cifras de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud, el cáncer es la segunda causa de mortalidad en niños mexicanos entre 4 y 15 años.
La doctora Yadira Melchor, oncóloga pediatra del Centro Médico ABC, advierte que el cáncer infantil representa la segunda causa de muerte en edades de 0 a 18 años, y que el cáncer más común en niños es la leucemia linfoblástica aguda, que representa el 25%; en segundo lugar, los tumores sólidos del sistema nerviosos central con 20%; linfomas, 13%; y el 42%, el resto de los demás tipos.
“Sin embargo, el grave problema del cáncer infantil es que no hay un diagnóstico precoz, ya que, no se puede prevenir. Depende de la etapa en la que son diagnosticados, entre más tarde sea, menos probabilidad hay de supervivencia. De detectarse a tiempo el cáncer en los niños, es curable en un 90%”, comentó la oncopediatra.
Por eso en el marco del Día Internacional contra el Cáncer Infantil, que se celebra este 15 de febrero, la especialista de la Unidad de hematología y oncología pediátrica ABC, asegura que dar a conocer los signos y síntomas es la mejor manera de crear conciencia y educación sobre este problema de salud infantil.
“Como una forma de unirnos al Día Internacional de Cáncer Infantil, en el Centro Médico ABC, les informamos a los padres los datos de alarma a través de una mnemotecnia, reconocida por la Asociación Mexicana de Oncohematología Pediátrica, que a través de la palabra PEDIATRAS, se observan estos signos y síntomas:
Pérdida de peso inexplicable.
Estrabismo o anomalías oculares (leucocoria, disminución de la agudeza visual).
Dolor de cabeza matutino, con vómito, persistente.
Inflamación o dolor persistente en las articulaciones, huesos o cojera.
Anormalidades a la palpación en el cuello, abdomen o en las extremidades (visceromegalias, masas palpables, asimetrías).
Tos persistente.
Recurrencia febril inexplicable.
Anorexia, astenia o síntomas de anemia (palidez exagerada o cansancio prolongado).
Sangrado excesivo o sus manifestaciones (hematomas, petequias).
De esta manera, explicamos todos los datos de alarma que pude tener un paciente o identificarlos para un diagnóstico de cáncer y llevarlo a una valoración oncológica oportuna, así como a revisiones mensuales”, dijo la especialista.
Otro dato interesante es que los niños deben estar conscientes de su problema de salud. “De acuerdo con la edad, se les platica sobre su enfermedad y la responsabilidad que ellos tienen ante los medicamentos, ya que esto significa que haya apego, lo que habla del éxito que podamos tener en el tratamiento, además, para los padres esto es muy importante por la dinámica familiar”, expresó la doctora Melchor.
El Centro Médico ABC cuenta con un programa bien establecido donde, una vez iniciado el tratamiento o cuando se hace el diagnóstico, participan médicos oncólogos, hematólogos, cirujanos oncólogos, neurocirujanos, radio-oncólogos, infectólogos, expertos en trasplantes de médula ósea, psicólogos, nutriólogos, trabajo social; unidos para ofrecer al paciente y su familia un tratamiento integral, individualizado y todo el apoyo que necesite.
“Trabajamos para que el paciente pueda tener una vida lo más normal posible y eso significa que realice las actividades de un niño de su edad, en el ABC contamos con la Clínica de Hematología y Oncología Pediátrica, donde ofrecemos un manejo médico y escuela para padres con psicólogas. Además, de talleres donde se explica sobre la enfermedad, el cáncer y la conducta de los niños, así como herramientas que son materiales didácticos que tratan sobre el trasplante de medula ósea, enfermedades comunes como leucemia y tumores sólidos”, concluyó la especialista.
Lo más importante es estar alertas ante cualquier cambio que se observe en los niños e inmediatamente acudir con el médico. Y saber que el cáncer en los niños es curable siempre y cuando se detecte a tiempo.