Policías mexicanos hirieron a una menor estadounidense embarazada en Reynosa porque su acompañante se negó a detener la marcha de su automóvil, informó el lunes la fiscalía de la región, precisando que ella y su bebé están fuera de peligro.
En esa misma región, tres hermanos de la misma nacionalidad fueron presuntamente asesinados por uniformados en octubre.
La menor de 14 años se encontraba la noche del domingo con un amigo a bordo de una camioneta a punto de partir de una tienda cercana a un puente internacional, que conecta Reynosa. Ambos fueron interceptados por policías a bordo de "tres patrullas (...) que les ordenaron detenerse", especificó la fiscalía.
"Pero el amigo de la menor hizo caso omiso y emprendió la fuga a toda velocidad", lo que provocó que los policías "abrieran fuego contra las llantas de la camioneta para detener su marcha", pero una de las balas hirió a la menor.
"Los mismos oficiales la llevaron a un hospital particular para su atención médica", sostuvo la fiscalía.
La menor "y su bebé están fuera de peligro", mientras que "los policías estatales, se encuentran a disposición" de la justicia, concluyó la fiscalía.
Entre los varios episodios de violencia registrados últimamente en Tamaulipas está el hallazgo el 30 de octubre de los cadáveres de los jóvenes Érica Alvarado Rivera, de 26 años, y sus hermanos Álex, de 22; y José Ángel, de 21 - originarios de Progreso (Texas) -, a las afueras del municipio de Matamoros, limítrofe con Brownsville (Texas).
Su madre, Raquel Alvarado, sostiene que sus hijos fueron secuestrados el 13 de octubre por hombres armados a los que se enfrentaron después de que golpearan ese mismo día a Érica y a su novio en un puesto de carne asada de Matamoros.
Basada en testimonios que ella misma recopiló, Raquel Alvarado aseveró que esos sujetos armados forman parte de la escolta de la alcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar, y que a finales de octubre fueron interrogados por la fiscalía, que aún no ha informado más sobre el caso.