Capturan a homicida
Personal de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) capturó a un sujeto que, tras una riña, presuntamente mató a un hombre con un tubo metálico en el interior de una vivienda de la colonia Vallejo, en febrero pasado.
La procuraduría capitalina refirió que la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Desconcentradas, por conducto de la Fiscalía Desconcentrada de Investigación en Gustavo A. Madero, identificó al presunto homicida como Gabriel Pedroza Serrano.
Además, quedó asentado en el expediente que el pasado 13 de febrero el probable responsable fue capturado por agentes de la Policía de Investigación cuando trató de ingresar a un domicilio de la calle Mellado, colonia Vallejo, en el que se ocultó, un día después de cometer presuntamente el ilícito.
El día de los hechos, una inquilina quiso ingresar a la vivienda ubicada sobre avenida Circuito Interior y se percató que la puerta principal estaba atorada, luego de escuchar ruidos y gritos como si se tratara de una pelea, se comunicó con la dueña de la casa, quien mandó a uno de sus hijos a inspeccionar el lugar.
El hijo de la propietaria ingresó por una accesoria adjunta al inmueble y halló el cadáver de José Luis Contreras Barrios, por lo que salió a pedir apoyo policial y de regreso encontró a su hermano Gabriel Pedroza Serrano, quien le confesó lo sucedido y trató de huir.
Elementos de la Policía de Investigación detuvieron al inculpado, quien aceptó ante la representación social haber privado de la vida a Contreras Barrios luego de una pelea que terminó en la planta baja de la vivienda, donde Pedroza Serrano se apoderó de un tubo metálico con el que golpeó en repetidas ocasiones a la víctima.
Una vez reunidos los elementos de prueba, el agente del Ministerio Público determinó ejercer acción penal contra el presunto responsable del delito de homicidio doloso por golpes, quien fue ingresado al Reclusorio Preventivo Varonil Norte.
Detienen a responsables del delito de trata
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) llevó a cabo un operativo en cuatro bares en la colonia Tacuba, delegación Miguel Hidalgo, donde detuvo a 10 personas, entre ellas los encargados de los establecimientos y donde presuntamente eran explotadas sexualmente 33 mujeres.
En conferencia de prensa, la titular de la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Trata de Personas de la PGJDF, Juana Camila Bautista Rebollar, informó que el operativo se llevó a cabo con base en una denuncia ciudadana que señalaba que en los cuatro locales se explotaba a mujeres a través del sexo servicio.
Aseguró que de las investigaciones, personal ministerial, peritos y elementos de la Policía de Investigación acudieron a los establecimientos, localizados en la avenida Mexico-Tacuba; donde en uno de ellos se encontró a un menor de 17 años de edad, quien ingería bebidas alcohólicas como cliente.
Precisó que en el primer bar se encontró a 10 mujeres que estaban siendo explotadas sexualmente; en el segundo a 12; en el tercero a seis y en el cuarto a cinco, por lo que procedió a la detención de los presuntos responsables.
Los detenidos, detalló, responden a los nombres de Leonardo Díaz Jiménez y María Elena Pérez Manzano, encargados de los lugares; Uriel Guerrero Pérez, Samanta Guerrero Pérez, Socorro Reyes Montes y Blanca Estela Saucedo Nava.
También, continuó, se detuvo a Rosa Isela Téllez de Anda y María Esteban Flores Roque, encargadas de otros de los establecimientos mercantiles y a Antonio López Morelos y Rita Elena López Mérida.
Luego de asegurar los inmuebles, se decretó acuerdo de retención toda vez que las víctimas, a través de la Cámara de Gesell, formalizaron su denuncia, por los delitos de trata de personas en su modalidad de explotación por prostitución y corrupción de personas menores de edad y se ofreció a las agraviadas, atención médica y psicológica.
La funcionaria de la PGJDF explicó que de acuerdo con el testimonio de las víctimas, la mecánica de explotación consistía en que tenían que hacer “ficheo” con los clientes y tener salidas para hacer sexo-servicio, cobrando por copa, del cual 40 por ciento era para el establecimiento y 100 pesos por la salida para el negocio.
Expuso que si las mujeres se excedían del tiempo del servicio de una hora, les exigían 100 pesos más o en su caso les quitaban todo el dinero; además, les imponían castigo si llegaban tarde y no podían faltar los viernes, sábados y domingos que eran los días más concurridos.
De esta forma y luego de reunir los elementos de prueba correspondientes, la referida fiscalía determinó el ejercicio de la acción penal contra los probables responsables por lo que las mujeres fueron remitidas al Centro Femenil de Readaptación Social de Santa Martha Acatitla y los hombres al Reclusorio Preventivo Varonil Norte.