Es importante que se pueda conocer los motivos que provocaron la riña del 20 de septiembre en el reclusorio norte, los avances de la investigación y los móviles de la misma, no solo con fines de impartición de justicia, si no para detectar conductas y causas que estén relacionadas y que ayuden a evitar tan lamentables sucesos.
La Diputada del Grupo Parlamentario del PAN, de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Olivia Garza de los Santos, solicitó a la Subsecretaría del Sistema Penitenciario del Gobierno del Distrito Federal un informe respecto a la riña registrado el pasado 20 de septiembre en el Reclusorio Norte.
En tribuna, la Presidenta de la Comisión Especial de Reclusorios de la ALDF enfatizó que sobre este incidente se desconoce el número exacto de internos que participaron en la riña, siendo que en esos módulos habitan más de 350 personas y es fundamental para ésta representación conocer éstos datos, así como el perfil criminógeno de los mismos y las razones de su clasificación en dichos módulos.
Garza de los Santos destacó que la obligación del Gobierno Local ante los internos dentro del Sistema Penitenciario es garantizar su seguridad, por lo que resulta imperante fincar las responsabilidades correspondientes y analizar, si esta riña no es parte de una inconformidad ante la tarea de la Subsecretaria del Sistema Penitenciario, la cual ha venido reacomodando y ordenando un sistema carcelario que estaba olvidado, lo cual, puede molestar los diferentes círculos que se han alimentado de la corrupción del sistema.
Por lo anterior, Olivia Garza, reiteró que la Subsecretaría del Sistema Penitenciario cuenta con todo el respaldo de la ALDF, pues el objetivo de la Comisión Especial de Reclusorios es coadyuvar a mejorar la condiciones de vida dentro de los penales del Distrito Federal, dotarlos de marco jurídico, lograr una reinserción social, inhibir la corrupción y todo ello en el marco de respeto a los derechos humanos.
Finalmente, la diputada panista, enfatizó que lo sucedido el 20 de Septiembre en el Reclusorio Norte es una muestra clara de que urge al sistema penitenciario normar jurídicamente su funcionamiento al interior con el fin de fortalecer las tareas de quienes laboran en el sistema, transparentarlo para inhibir la corrupción y garantizar la seguridad de quienes compurgan una sentencia.