Si el comercio ambulante fuera regulado en la ciudad, esta práctica podría generar hasta 300 millones de pesos cada año a las delegaciones capitalinas, afirmó Patricia Mercado, secretaria de Gobierno de la Ciudad de México.
Luego de comparecer ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), con motivo de la glosa del Cuarto Informe de Gobierno local, explicó que los comerciantes informales registrados pagan aproximadamente 700 pesos trimestrales.
“Si tuviéramos a todos los ambulantes inscritos, las 16 delegaciones tendrían una entrada acumulada durante el año de 300 millones de pesos”, indicó la funcionaria capitalina.
Mercado Castro aclaró que no se refiere a los trabajadores de los tianguis, si no del comerciante individual que ocupa un espacio en la vía pública.
Refirió que los gobiernos delegacionales son los que tienen la competencia en la materia, de tal manera que ya se trabaja con ellas para poder imponer la reubicación de ambulantes y otorgarles su reconocimiento legal.
Esto se hace, detalló, siempre que existe un acuerdo entre el propio comerciante, los vecinos y la delegación, porque no se trata de ofrecer cualquier espacio o banqueta, sino que deben garantizar que no haya inseguridad, insalubridad o quejas vecinales.
Sin embargo, aclaró que en el Centro Histórico “de plano no se permitirá el ambulantaje”, por lo que se hace una inversión para establecer 20 plazas comerciales, a cambio de que los comerciantes ya no se instalen en la calle. “En este momento tenemos el proyecto de siete (plazas)”.
La secretaria mencionó que se tiene un acuerdo con las delegaciones para que registren y cobren por el espacio público, lo que conviene tanto a las autoridades como al propio comerciante porque les dará seguridad y ya nadie los molestará o extorsionará.