La Secretaría de Turismo de la Ciudad de México (Sectur CDMX) y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de la capital del país (DIF CDMX), ampliará los beneficios del Programa Sonrisas por tu Ciudad hacia la población vulnerable que así hará realidad su derecho al descanso, la recreación y cultura.
Así lo establecen los términos del documento que este día, en el Mirador de la Torre Latinoamericana, firmaron los responsables de ambas dependencias: Carlos Mackinlay por la Sectur CDMX y Esthela Damián, por el DIF CDMX en un acto celebrado en el piso 37 del emblemático inmueble, que forma parte del Centro Histórico.
El documento –también denominado Convenio en las Alturas- prevé la colaboración de ambas instituciones para que la población atendida por el DIF CDMX –personas de condición económica precaria; con discapacidad; madres solteras; menores de edad en riesgo de abandonar la escuela-, disfruten de recorridos y paseos turísticos.
De esta manera, la Sectur CDMX se compromete a proporcionarles ese servicio, que forma parte del Programa Sonrisas por tu Ciudad, y que entre sus atractivos ofrece la entrada gratuita a centros de diversión –como La Feria y Six Flags-; visitas a museos y recorridos por lugares como el Desierto de los Leones o el parque Los Dinamos.
El Programa Sonrisas por tu Ciudad les proporcionará también transportación, de ida y vuelta, igualmente gratuita, a bordo de autobuses de calidad turística; la asistencia de guías turísticos debidamente capacitados y sin costo alguno y durante los recorridos podrán disfrutar de refrigerios y agua.
El convenio, que tendrá una vigencia hasta el 30 de Noviembre de 2024, establece también que las instituciones financiarán las actividades que sean acordadas con los recursos de sus respectivos presupuestos, de conformidad con la disponibilidad de los mismos y siempre con base en su respectiva legislación interna.
Luego de la firma del convenio, los funcionarios acompañados de colaboradores e invitados especiales realizaron un recorrido por la Torre Latinoamericana que culminó en el Mirador, un punto desde el que se aprecia todo el Valle de México; en su momento el edificio fue considerado el más alto de Iberoamérica: tiene 44 pisos y una altura máxima de 204 metros.