Por tercera vez en su administración, el priista Eruviel Ávila anunció un cambio en el mando de seguridad del Estado de México, la entidad más poblada del país, con problemas de violencia y clave en el ámbito político-electoral.
Ávila comenzó su gobierno con Salvador Neme como titular de la Agencia de Seguridad Estatal, aunque en noviembre de 2011 esa instancia desapareció y el mismo funcionario quedó al frente de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
El primer cambio de mando ocurrió en agosto de 2013, cuando Neme se sumó al gobierno de Enrique Peña Nieto y Ávila nombró a Rocío Alonso Ríos como secretaria de Seguridad Ciudadana.
El segundo cambio fue en marzo de 2014, cuando Damián Canales sustituyó a Alonso Ríos, en medio de un repunte de la inseguridad en municipios cercanos a la capital mexicana, y por lo que el gobierno del presidente Peña Nieto duplicó la presencia de policías federales.
En diciembre de 2014, describe la agencia Quadratín, la Secretaría de Seguridad Ciudadana se convirtió en un organismo público descentralizado para ser Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana (CES), tras una reforma aprobada en el Congreso mexiquense e impulsada por el Verde Ecologista de México (PVEM), aliado del priismo.
Así llegamos a este domingo, cuando el gobernador Ávila informó sobre un tercer cambio de mando: Eduardo Valiente Hernández se hará cargo de la CES, en lugar de Canales, quien renunció para incorporarse al gobierno federal.
Ávila, según un reporte del diario Reforma, dijo que aceptó la renuncia tras platicar con el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.