Como parte de las Acciones Sociales por Tepito, la Secretaría de Desarrollo Social del Distrito Federal llevó a cabo el Rally por los Derechos de las Niñas y los Niños y actividades de prevención de la violencia familiar.
En el Centro de Desarrollo Comunitario Cuauhtémoc, Adolfo Savín Cravioto, subsecretario de Participación Ciudadana de la Sedeso DF, destacó la importancia que tiene para el Gobierno capitalino que los pequeños conozcan sus derechos.
En el marco del 25 Aniversario de la Convención de los Derechos del Niño y ante decenas de infantes provenientes de los Centros de Día del DIF-DF, comentó que se trabaja para que la infancia tenga una vida sana y feliz.
En su oportunidad, César Iván Escalante Ruiz, director ejecutivo de Apoyo a la Niñez del DIF-DF, recordó que las niñas y niños tienen derecho “a un nombre y una nacionalidad, a vivir en armonía, a la alimentación, a la protección contra el trabajo infantil, a la educación, a conocer y disfrutar la cultura, a la diversión, a la salud, a opinar, a la no discriminación y a tener una familia”.
Resaltó la participación de la Subsecretaría de Participación Ciudadana, de la Dirección General de Igualdad y Diversidad Social (DGIDS), de la Dirección General de Servicios a la Comunidad de la Procuraduría General de Justicia del DF y la comunidad de Tepito en el Rally, con el que se pretende abonar a la reconstrucción del tejido social en la zona.
Luego del acto protocolario, dieron el banderazo de salida del Rally de los Derechos de las Niñas y los Niños, donde las pequeñas y los pequeños formaron grupos de 10 y comenzaron su travesía al buscar palabras en una “Sopa de Letras”, realizar equilibrio en una barra, tratar de meter una pelota en una pared de madera hueca y un mantel llamado “Plato del Buen Comer”.
Además, pasaron por un túnel hacia un módulo donde les hacían preguntas para saber qué tanto sabían sobre sus derechos y explicárselos, luego escalar pequeños obstáculos de madera hasta llegar a otro módulo donde se les habló de sus derechos a un nombre y una nacionalidad y con los ojos vendados tratar de pasar entre una portería.