Después de la desastrosa actuación que ofreció en la Europa League, Liverpool sorprendió a propios y extraños al vencer 2-1 a Manchester City, sublíder de la Premier League y al que privó de recortar distancia con el puntero Chelsea.
El mediocampista Jordan Henderson hizo estallar a Anfield con su tanto al minuto 11, luego el ariete bosnio Edin Dzeko emparejó los cartones al 25 y finalmente, al 75, el brasileño Philippe Coutinho colocó cifras definitivas.
Liverpool, herido por su despedida temprana en la UEL a manos del Besiktas turco, le peleó de tú a tú a la artillería “citizen”, que hoy lamentó que el goleador del torneo, el argentino Sergio Agüero, saltara al campo con la pólvora mojada.
Los chicos del timonel chileno Manuel Pellegrini trataban de levantar la cara lejos de su hogar, porque tampoco la pasaron bien a media semana, al ceder en casa 1-2 en la “ida” de los octavos de final de Champions frente al Barcelona español.
Pero el irse con las manos vacías significó un duro tropiezo para el plantel del “Ingeniero”, pues se quedaron con sus mismas 55 unidades y la decepción de no aprovechar para meterle presión a los “blues”, toda vez que ellos tendrán un cotejo pendiente debido a que este domingo disputaron la final de la Copa de la Liga.
En la otra cara de la moneda, este resultado impulsó a que los “reds” se metieran al quinto lugar de la tabla general con 48 puntos en 27 encuentros y levantaron la mano para apretar la lucha por los boletos de clasificación a competencias continentales.