La Conmebol y la Concacaf ratificaron el jueves a Estados Unidos como sede para la Copa América Centenario, que se jugará el próximo año con la participación de 10 selecciones sudamericanas y seis de la zona Norte, Centroamérica y del Caribe.
Dicha decisión se tomó tras una reunión entre directivos de ambas asociaciones que se llevó a cabo en la Ciudad de México.
"Fue una reunión muy productiva en donde todos los individuos y las organizaciones llegamos a un punto en el que todos estamos alineados en llevar la Copa América Centenario a Estados Unidos, en las fechas previamente anunciadas", dijo a periodistas Jurgen Mainka, director de comunicación de la Concacaf.
"Sabemos que hay pasos que debemos seguir dando para que esto se lleve a cabo, pero esta alineación entre todos queda muy clara", agregó.
La Copa es un evento singular ideado para celebrar los 100 años de la Confederación Sudamericana de Fútbol en junio del próximo año.
El torneo quedó en entredicho tras la investigación de las autoridades estadounidense contra empresarios y dirigentes de alto rango del fútbol mundial.
La posibilidad de un cambio de sede surgió luego de hacerse público el escándalo de corrupción en la FIFA, que terminó con la detención de ejecutivos de alto rango tanto de Sudamérica como de la Concacaf.
Las confederaciones acordaron respetar un acuerdo previo que fijaba a Estados Unidos como sede. Pero el país anfitrión será el que tenga la última palabra respecto a ese acuerdo, dijo el presidente de la Conmebol, Juan Ángel Napout.