Liverpool ligó su segunda derrota consecutiva y perdió el sueño de conseguir un posible
triplete, luego de caer este martes con marcador de 2-0 ante Chelsea, que avanzó a los cuartos de final de la FA Cup.
Gracias a los goles del brasileño Willian, al 13, y del inglés Ross Barkley, en el 64, los Blues hicieron pesar Stamford Bridge y superaron la quinta ronda del certamen.
El fin de semana, el líder de la Premier League perdió su invicto de 44 partidos ante Watford, previamente cayó en la ida de los octavos de final de la UEFA Champions League y ahora, quedó fuera de la disputa por el título del torneo de clubes más antiguo del mundo.
Al 12´, cayó el primer gol gracias a dos errores del Liverpool, pues en la salida, Fabinho regaló el balón a Willian, quien disparó desde fuera del área y marcó el tanto de la ventaja, luego de que Adrián San Miguel atacó mal el esférico para permitir que se metiera al arco.
Ocho minutos más tarde, los Reds tuvieron la oportunidad de igualar el marcador, en una serie de rebotes dentro del área, pero las oportunas intervenciones de Kepa Arrizabalaga y la zaga defensiva evitaron la caída del arco.
En la media hora de partido, Arrizabalaga volvió a salvar del empate al recostarse a su lado izquierdo para atajar un embate de Sadio Mané, quien se metió al área a pesar de la presión defensiva.
Para la parte complementaria, Liverpool encimó a Chelsea y emparejó las acciones, por lo que se volvió un partido de ida y vuelta, pero los anfitriones mostraban más claridad.
Luego de reventar el travesaño momentos antes, al 64´ los locales ampliaron la ventaja gracias Ross Barkle, quien se encontró con el balón detrás de media cancha y lo condujo hasta la media luna, donde disparó con derecha para dejar sin oportunidad a San Miguel.
Dos minutos después, Pedro Rodríguez tuvo la oportunidad de convertir el marcador en goleada al quedarse mano a mano con el meta visitante, pero estrelló su remate en la humanidad del portero.
En la recta final del final del encuentro, los pupilos del alemán Jürgen Klopp apretaron en la ofensiva, gracias a la entrada del brasileño Roberto Firmino y el egipcio Mohamed Salah, pero el reloj se esfumó y cayeron de nueva cuenta.