Alemania, 21 de junio de 2024 ::: A base de fútbol y una imagen imponente como equipo, con un resultado
corto para la insultante superioridad sobre la vigente campeona, España presentó su candidatura a soñar en la Eurocopa 2024, minimizando a Italia, que escapó de la goleada por la firmeza de Donnarumma, para sellar con tanto en propia puerta de Calafiori el pase a octavos como líder de grupo.
Superior desde el talento, intensa, mordiendo arriba, ajena a la presión y con una imagen de equipo imponente, España pasó por encima de Italia.
Superior en cada faceta del juego pero sin la precisión en el primer acto en el remate que impulsó un estreno alejado a la tensión que siempre aseguraba una cita con Croacia y desatándose en la segunda cuando el factor fortuna sonrió a quien tanto lo merecía.
::: El desborde de Nico y Yamal
Recuperó su esencia desde el balón España, aumentando la posesión pero asociándola a un fútbol directo y vistoso, repleto de vigorosidad física y talento; el de Nico Williams para convertir el partido en pesadilla para Di Lorenzo, superado sin ayudas cada vez que fue encarado.
La España de extremos amenazó por la izquierda y presentó por la derecha el talento de Lamine Yamal que hace recular al rival.
Una perfecta sintonía con Pedri volviendo a ser Pedri, puro talento, emergiendo la figura dominante de Rodri en la medular, con máxima efectividad en el pase, y con Fabián omnipresente, tan eficaz en el robo como en la finalización.
Italia sobrevivió a una avalancha futbolística por Donnarumma y por la falta de precisión de España en el remate.
Ya voló el gigantón italiano cuando no se cumplía el minuto dos y Nico se subía a la bicicleta antes de poner un pase preciso a la cabeza de Pedri.