El líder de la competencia, Pumas, todavía no se acordaba que la liguilla había iniciado, sufrió ante Veracruz en cuartos de final y en el primer tiempo de esta semifinal fue dominado por un América que tomó la iniciativa pero falto de contundencia.
Universidad Nacional intentó tener el balón en los primeros minutos para bajarle el entusiasmo a los azulcremas, pero su táctica no funcionó ante la presión del cuadro local que comenzó a crear peligro con un disparo lejano que fue desviado por Oribe Peralta y que casi sorprende a Alejandro Palacios.
Después el grito de gol se produjo por un sector del estadio cuando el ecuatoriano Michel Arroyo sacó disparo muy cercano al poste izquierdo pero pegó en la publicidad para engañar a la afición de casa.
La polémica apareció antes de los 20 minutos luego que en su primera llegada el cuadro del Pedregal abrió el marcador con remate del uruguayo Matías Britos, pero el silbante Fernando Guerrero anuló por inexistente fuera de juego.
Dicha acción pegó en Pumas, que en lugar de reaccionar ya no fue capaz de tocar la meta de Moisés Muñoz y las Águilas siguieron con sus fallas en el último cuarto cancha y sin encontrar rematador en dos centros rasos que pasaron por toda el área universitaria.
El empate salió barato a los dos por lo ocurrido en la primera mitad y en el segundo lapso los de Coapa continuaron con el dominio y acariciaron el gol con el centro diagonal de Paul Aguilar pero que no alcanzó Darwin Quintero para empujar.
Universidad Nacional apostó al contragolpe y en uno de ellos Ismael Sosa desparramó al paraguayo Pablo Aguilar, quien perdió el mano a mano y se fue expulsado por doble amarilla al minuto 52.
El técnico americanista Ignacio Ambriz, consciente de que falta la vuelta de inmediato acomodó su defensa con la salida de Quintero y el ingreso de Pimentel, el cual no respondió al ajuste de Memo Vázquez en Pumas con la entrada de Daniel Ludueña por Britos.
Tras las modificaciones se generó el gol del cuadro auriazul con el remate de Sosa, quien solo empujó el balón al fondo de las redes tras el centro de Fidel Martínez por el costado izquierdo para el 1-0.
La incredulidad se produjo en las Águilas que de ser mejores en el campo, se pusieron abajo en el marcador y se quedaron con dos hombres menos, ya que se fue expulsado Miguel Samudio al 64.
América quiso sacar el coraje pese a la inferioridad numérica y en una descolgada que pintaba para más en busca del empate, perdió el balón y vio como cayó el segundo de Universidad Nacional por conducto de Alcoba, quien se había quedado al ataque y a bocajarro no perdonó para el 2-0.
Con la superioridad de jugadores, Memo Vázquez y sus Pumas no se conformaron y así firmaron el 3-0 con remate del goleador “Lalo” Herrera en lo que ya era un dominio absoluto de la visita.
Así con un juego voluble, Pumas que fue perdonado en el primer lapso, no tuvo piedad contra el acérrimo rival y en el complemento hizo la diferencia cuando pudo hacerlo para estar cerca de la final del fútbol mexicano, a la espera de que se escriba la historia en el Olímpico Universitario.
El arbitraje estuvo a cargo de Fernando Guerrero, quien tuvo una labor irregular al anular junto a su abanderado número dos Juan Rangel un gol de Pumas por parte de Britos.
Amonestó a los paraguayos Miguel Samudio, Pablo Aguilar y Osvaldo Martínez, y a Paul Aguilar por América.
Por la visita hizo lo propio con David Cabrera, el paraguayo Darío Verón, y a los uruguayos Gerardo Alcoba y Matías Britos.