Comprando boletos en reventa o acordando con abonados de Diablos, la gente de Chivas no podía quedarse fuera del Infierno.
Aunque los boletos llegaron a costar mil pesos, la afición rojiblanca recurrió a la reventa
para poder ver el partido de la semifinal de ida en el Estadio Nemesio Diez frente a Toluca.
En cada punto de los alrededores del estadio había gente ofreciendo boletos y hasta abonos para los seguidores del Rebaño que no alcanzaron en la venta en línea.
Algunos revendedores hacían negocio, pero otros decidieron rentar sus abonos a aficionados de Chivas debido a que no podían usarlos esta noche de jueves y se ponían de acuerdo para que se los devolvieran más tarde.
Los boletos que se pusieron a la venta para este partido se liberaron vía internet el martes por la tarde y tres horas después ya estaban agotados. Los precios iban de los 350 pesos en la zona general, 500 pesos en zona preferente, 600 pesos en palcos y 600 en zona escarlata alta.