A reserva de que Pumas de la UNAM saque la victoria para seguir líder en el Torneo Apertura 2018 de la Liga MX, el cambio de horario por ahora tiene a un Estadio Olímpico Universitario con un ambiente desangelado.
La lluvia y lo nublado propició que varios vendedores de las inmediaciones del inmueble decidieran no ponerse o bien cubrir su mercancía, lo que sin duda afectó en sus ventas, contrarió cuando pega el sol, usualmente al mediodía.
Como es costumbre con estos climas, los famosos hules relucieron y se vendieron al por mayor para evitar que los aficionados de Pumas y Pachuca se empaparan y hasta una enfermedad pudieran contraer.
Contrario a la buena entrada vista en el partido de presentación en CU, frente a Necaxa, hoy las tribunas del México 68 presentaron más huecos a pocos minutos de que el silbante Jorge Isaac Rojas pitara el inicio del juego de esta jornada cuatro.
Al final, la lluvia, en términos generales, siempre perjudica, pues a pesar de tratarse de un domingo, algunos encharcamientos e inundaciones hicieron más lento el tránsito en diversas zonas aledañas a CU en la capital mexicana.
Por más que el ambiente no luzca el colorido auriazul de otras ocasiones, con el silbatazo inicial se prevé que ambas escuadras hagan olvidar los inconvenientes de las precipitaciones y que el balón ruede de la mejor manera posible.
Por lo pronto, Pumas cuenta con nueve puntos gracias a tres victorias, en tanto Tuzos es último sin unidades. La cancha de CU suele contar con buen drenaje para beneficio del espectáculo.