Ricardo Peláez dijo hoy que acepta el puesto de director deportivo de la Selección Mexicana a partir de los primeros días de enero y después de la Copa del Mundo Brasil 2014 volverá a las Aguilas, a su puesto de presidente deportivo.
“En cuanto termine la participación de América en la Liga, que espero que sea en la final con el bicampeonato, Miguel Herrera automáticamente deja de ser entrenador de América, para irse a la Selección Nacional”, informó.
En cuanto a él, señaló, “tengo que dejar armado al América, debo traer un técnico, tengo que armar la pretemporada junto con él, los refuerzos y echar andar el equipo para el siguiente torneo que empieza el día 13 de enero”.
Afirmó, “mi incorporación, si se da en Selección Nacional, sería hasta los primeros días de enero”.
Dijo que “en caso de ir a Tri, iría seis meses. Terminado el Mundial regreso a mi posición como presidente deportivo del club América”.
El ex mundialista, se siente en una encrucijada entre estar con América y la trascendencia de la Selección Mexicana. “Es agradecer el futbol, es darle gracias a Dios, que me dé esta posibilidad, pero también es muy difícil dejar una por otra”.
“Aquí estoy feliz, me encantaría seguir así, pero también entiendo que es un gran reto, una gran opción y posibilidad y eso pasa pocas veces en la vida”.
En la entrevista al programa Pasión, se le planteó el tema de Carlos Vela, quien lleva más de dos años negándose ser seleccionado nacional, mientras tanto sigue en aumento su cifra de goles con la Real Sociedad, de la Liga Española.
“Es un tema bien delicado, porque si haces una encuesta ahorita puedo decir que el 60 por ciento va decir que no lo convoque, porque la gente está muy molesta”, empezó a detallar.
Luego señaló, “la puerta de la selección está abierta, porque eso fue en otros tiempos. Si a partir del lunes que fuera director deportivo con Miguel Herrera (de entrenador) y en la selección, viera negativa de Vela, ni lo convoco”.
Enseguida presentó otra posibilidad: “si el jugador puede pensar distinto, porque tiene el derecho a equivocarse como todos los hacemos, quizá la actitud del jugador ya cambió y recapacitó, entonces la puerta está abierta”.
Pero luego advirtió otro problema, al decir que “también hay que ver el grupo, quizá los jugadores piensan distinto, por eso hay que evaluar muchas cosas y estar con el grupo”.