La selección mexicana de fútbol tuvo ayer un entrenamiento ligero con pruebas físicas y médicas para los nueve jugadores que comenzaron la concentración para el Mundial mientras los otros catorce convocados siguen en competición o tienen descanso.
Cumplidos dos días de exámenes médicos, los jugadores cumplieron el primer entrenamiento formal.
“Todos pasamos las pruebas físicas, de fuerza y de resistencia. Han sido muy exigentes”, declaró el centrocampista Juan Carlos Medina al final de la sesión vespertina en el Centro de Alto Rendimiento de la capital mexicana.
“Viene trabajar muy fuerte y esperar”, añadió Medina al apuntar que la exigencia que se tiene desde esta primera semana “es al máximo”.
Están concentrados el portero Jesús Corona, los defensas Miguel Layún, Francisco Rodríguez, Carlos Salcido; así como los centrocampistas Marco Fabián y Juan Carlos Medina, y los delanteros Raúl Jiménez y Alan Pulido.
El resto de los catorce convocados por Herrera se incorporarán a medida que terminen su participación en sus respectivos equipos.
El seleccionador Miguel Herrera tendrá el equipo completo el 24 de mayo, cuatro días antes de su partido amistoso contra Israel en la capital mexicana.
Alan Pulido, una de las sorpresas de la Liga mexicana, dijo que ha llegado a la selección para aportar y pelear “por un lugar en el equipo”.
Después del amistoso con Israel, la selección mexicana viajará a Estados Unidos para enfrentar a Ecuador, el 31 de mayo; Bosnia, el 3 de junio; y Portugal, el 6 de junio.