El gladiador es pintado para esta celebración especial en torso, brazos y cara y así representar “a las almas que se han perdido, sabemos que viven en un lugar muy sagrado y que están en paz”; su caracterización tarda cerca de dos horas “pero vale la pena”.
En representación de esas almas que viven en un lugar sagrado, Olímpico se prepara rumbo a una semana diferente en el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), en busca de regresar a los primeros planos.
Previo a las funciones de “Día de muertos” que se realizarán el viernes 31 de octubre y domingo 2 de noviembre en la Arena México, el luchador aseguró que se verá algo innovador, nunca visto, donde se unirán dos grandes tradiciones en México; el arte del pancracio y el festejo a quienes ya no están en este mundo.
“La Arena México se va a transformar, los perdedores irán al inframundo, es un espectáculo muy poderoso jamás visto, estamos tomando parte en el programa, habrá una sorpresa grande, no se los puedo decir ni adelantar, pero es una sorpresa para todos”, dijo.
Comentó que la empresa realizará un homenaje a la tradición del “Día de muertos” para honrar a quienes ya no están, “honor a quien honor merece”, y dejó en claro que se verá algo diferente, no la función típica de viernes o domingo.
“La mayoría de quienes representamos al mal (rudos) iremos pintados, es una sorpresa grande, habrá elementos con atuendo o vestimenta que llamará la atención, la gente se merece esto, salir de lo rutinario, darles algo diferente”, agregó.
El gladiador es pintado para esta celebración especial en torso, brazos y cara y así representar “a las almas que se han perdido, sabemos que viven en un lugar muy sagrado y que están en paz”; su caracterización tarda cerca de dos horas “pero vale la pena”.
Hijo de luchador y con 24 años de trayectoria, es consciente que su carrera ha sufrido altibajos y golpes duros, como perder la máscara en el año 2010, meses después de regresar al CMLL tras una pequeña aventura fuera de la empresa, de lo cual se arrepiente.
“Cuando salí buscaba nuevos horizontes, regresar fue un poco complicado, mi gran error fue haberme salido de la empresa, regreso en junio (de 2010) y en septiembre pierdo la máscara, pero estoy tranquilo, en pie de guerra aún”, señaló.
Consciente que esa decisión fue mala “pero yo la tomé y lo asumo”, trabaja duro día a día para demostrar que sigue vigente, y aunque no ha sido programado como él quisiera, está “agradecido con la empresa, tuve muchas satisfacciones”.
Mientras trabaja con Bobby Zavala en busca de realizar defensas de su título occidental de parejas, quiere el campeonato de la Arena Coliseo que poseen Delta y Guerrero Maya, e incluso el mundial de dúos que tienen Shocker y Negro Casas, “estamos preparados para enfrentar al que sea, queremos nuevos retos”.
Finalmente, su objetivo es mantenerse dentro del agrado de la afición, aunque para ello necesita ser programado de manera continua, por lo que pidió a la gente de programación “que no se olvide de Olímpico”, quien estará en la “Catedral” el 2 de noviembre.