Los dirigentes de la Fórmula 1 decidieron este martes en Ginebra, por unanimidad, modificar el formato tradicional de la sesión de clasificaciones del sábado ya desde 2016, se supo este miércoles al margen de los entrenamientos en Barcelona.
El objetivo principal es dar más espectáculo la víspera del Gran Premio.
Es uno de los resultados de las reuniones del Grupo Estratégico de la F1, y de la Comisión F1, que tuvieron lugar el martes en Suiza. Estas reuniones estaban destinadas de inicio a llegar a un acuerdo sobre la reglamentación del Mundial a partir de 2017, tras dos años de dominio de Mercedes.
Ante los representantes de la FOM y de la Federación Internacional Automovilística (FIA), garante de las reglas técnicas y deportivas, las escuderías de la F1 decidieron que los pilotos seguirán en la pista durante los tres periodos de la sesión de una hora (Q1, Q2 y Q3) hasta que sean eliminados, uno tras otro, en función del cronómetro.
La Q1 durará 16 minutos, con 22 coches de inicio, y el piloto más lento será eliminado al cabo de siete minutos, y después uno cada 90 segundos, hasta que sólo queden 15 para la Q2 (15 minutos), tras una pequeña pausa.
De estos 15 pilotos en la Q2, y siguiendo el mismo proceso, quedarán ocho para la Q3 (14 minutos), en lugar de los diez del pasado año.
Al final de la Q3, y tras las eliminación de los otros seis, cada 90 segundos, únicamente los dos pilotos más rápidos seguirán en pista en busca de la 'pole', en la última vuelta.
Este cambio deberá ser ratificado por el Consejo Mundial del automovilismo, el 4 de marzo, es decir, dos semanas antes de la primera clasificación de 2016, el 19 de marzo en Melbourne.
Otras decisiones para 2017 o 2018 han sido aplazadas a finales de abril, especialmente sobre la rebaja del coste de los motores y la mejora de las prestaciones de los monoplazas, con el fin de dar dos meses más a los ingenieros para finalizar los principales detalles técnicos (neumáticos, aerodinámica, etc.), informó una fuente cercana a la FIA.