El tenista británico Andy Murray ganó por primera ocasión en su carrera el Masters 1000 de Roma, luego de vencer al número uno del mundo en la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), el serbio Novak Djokovic por parciales de 6-3 y 6-3 y con ello también puso fin al dominio que había tenido el serbio sobre él.
La primera manga comenzó con ligera lluvia, sin embargo, dicho factor no influyó para detener el partido, aunque Djokovic pidió en varias oportunidades realizar una pausa hasta que cesará la lluvia.
Murray consiguió un rompimiento en el cuarto juego, a partir de esta acción el escoces fue protagonista, conectó 11 servicios en 19 oportunidades, elemento definitivo para que en el último juego consiguiera una rotura y se llevara el primer set 6-3.
En la segunda manga, la tónica fue parecida, pues el número tres del mundo siguió presionando a “Nole”. En el quinto juego el nacido en Dunblane, Escocia consiguió el break que sentenció la victoria sobre el primer cabeza de serie del torneo italiano.
"Esto de disputar finales en torneos de la serie Masters en arcilla es una experiencia nueva para mí", dijo el británico. "Es bonito el poder ser capaz de alcanzar nuevos objetivos a esta altura de mi carrera”.
Murray, medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, no le ganaba al serbio desde el verano pasado y al fin lo venció en tierra batida, además celebró su cumpleaños 29 con un triunfo y por ello los organizadores le dieron un pastel también.
El británico, dedicó su triunfo a su hija, quien tiene tres meses de nacida. "Siento que ahora juego por ella, de modo que dentro de unos años se pueda sentirse orgullosa de lo que he logrado", resaltó Murray.
Fue el primer título para Murray en Roma y se presenta justo una semana antes de que inicie el Abierto de Francia. Sólo un varón británico había ganado previamente el torneo: Pat Hughes en 1931.
Con este campeonato en Italia, el británico se coloca como favorito para ganar el segundo Grand Slam de la temporada, Roland Garros, torneo que se disputará en la capital francesa del 22 de mayo al 5 de junio.
Djokovic había ganado sus cuatro enfrentamientos previos sobre arcilla, pero debió lidiar con la fatiga tras sus desgastantes triunfos sobre Rafael Nadal y Kei Nishikori.