El colombiano Nairo Quintana mantiene la ilusión de ganar intacta. Pese a que el ciclista cafetero se ubica cuarto en la clasificación general, muestra optimismo y se siente capaz de arrebatarle la corona al campeón defensor, Chris Froome.
"Hasta que no llegue el último día no nos rendiremos. Seguimos soñando con el amarillo, se vienen días bonitos, terreno donde han marcado bastante la historia y tengo mucha ilusión de terminar de hacerlo bien y seguir buscando el sueño amarillo", dijo Quintana en conferencia de prensa, durante el descanso que se vivió ayer en la ronda gala.
Quintana, reconocido por sus condiciones de escalador y subcampeón del Tour de Francia en el 2013 y el 2015, está a una diferencia de dos minutos y 59 segundos del líder Froome en la actual edición de la competencia ciclista más importante del mundo por etapas.
El colombiano, líder de la escuadra Movistar, también es superado en la clasificación general por holandés Bauke Mollema del Trek-Segafredo y el británico Adam Yates de Orica.
A cinco jornadas de que concluya el Tour de Francia, incluyendo terreno de alta montaña en los Alpes, el colombiano admitió que en algunas etapas previas quiso atacar al líder del equipo Sky y lo hizo, pero lo encontró fuerte y respaldado por un gran equipo.
Sin embargo, aclaró que en lo que resta de recorrido no va atacar por brindar espectáculo o para que la gente lo vea, sino con base en estrategia que le permita descontar tiempo y conquistar la camiseta amarilla de líder.
"Preparado siempre estoy, lo que pasa es que según como veamos el equipo de él (Froome), sus fortalezas y sus debilidades", concluyó el ciclista colombiano.