EEUU, 4 de agosto 2022 :-: La NFL está buscando una suspensión indefinida de al menos un año, así como una multa contra
Deshaun Watson, tras apelar la decisión de la responsable de medidas disciplinarias que castigó al quarterback de los Browns de Cleveland sólo por seis partidos, dijo una persona cercana al recurso presentado por la liga.
Inicialmente, la Liga recomendó una multa de ocho millones de dólares. Pidió una sanción de al menos cinco millones en negociaciones que buscaban un arreglo pero que nunca se materializaron.
La NFL apeló la sanción a Watson por infringir la política de conducta personal de la Liga, lo que abrió la puerta para que el comisionado Roger Goodell o alguien a quien él designe imponga un castigo más severo.
Sue Robinson, exjueza federal, emitió el lunes su fallo después de que casi una treintena de mujeres acusaron a Watson en Texas de acoso y abusos sexuales durante sesiones de masaje que se realizaron cuando jugaba con Houston.
En su reporte de 16 páginas, Robinson describió la conducta de Watson como “más escandaloso de lo que la NFL supo previamente”.
El castigo impuesto por Robinson, en su primer caso desde que fue nombrada conjuntamente por la Liga y el sindicato de jugadores, quedó muy por debajo de la suspensión indefinida que buscaba la NFL.
Así que ayer, la Liga ejerció su derecho a apelar, otorgado por el contrato colectivo.
El sindicato tiene hasta la tarde del viernes para responder por escrito. Podría desafiar ante una corte federal el fallo que se emita tras la apelación, lo que generaría una disputa prolongada.
Brian McCarthy, portavoz de la NFL, dijo que no hay cronograma para que Goodell o la persona que designe emitan una decisión.
De acuerdo con la política de la Liga sobre conducta personal, la apelación se procesará en forma expedita. Además, se “limitará a la consideración de los términos de la medida disciplinaria impuesta” y “con base en una revisión del expediente existente, sin hacer referencia a evidencias o testimonios que no se hayan considerado previamente”.
La política indica también que la “decisión del comisionado o la persona que designe, la cual puede revocar, reducir, modificar o incrementar la medida disciplinaria incluida previamente, será final y vinculante para todas las partes”.
Es la primera vez desde 2020, cuando se firmó el nuevo contrato colectivo, que la liga y el sindicato recurren a un dirigente disciplinario nombrado especialmente con esa misión para determinar si hubo infracciones a las políticas de comportamiento. En el pasado, Goodell era juez y jurado para imponer sanciones a los jugadores.
Al apelar, la NFL devuelve ese poder a Goodell, quien puede elegir a otra persona para imponer cualquier castigo.