El tapatío Saúl Álvarez aprovechó la lentitud y escasa respuesta de Alfredo Angulo para imponerse por la vía del nocaut técnico en la pelea celebrada en el MGM Grand de Las Vegas.
"Canelo" lució mucho más fresco y ágil que su rival sobre el ring de la Garden Arena, donde el público terminó
insatisfecho con la decisión del réferi Tony Weeks, quien frenó el combate pocos segundos después del inicio del décimo asalto.
En ese momento, el rostro inflamado del mexicalense era prueba del dominio ejercido por el ex campeón mundial, que nunca vio en riesgo su victoria ante un adversario que sólo marcaba golpes y no dio batalla alguna.
El golpe definitivo de Álvarez se produjo en el comienzo del décimo round. Un upper de izquierda impactó franco en el rostro de Angulo, a quien Weeks ya había advertido en varias ocasiones sobre su pasividad en el cuadrilátero.
Cuando Weeks optó por detener el combate, las tarjetas estaban 89-82, 89-82, 88-83 con una clara ventaja de Álvarez.
Pese a que un sector del público gritaba "Perro, Perro", Angulo nunca despertó y sus ataques contra el "Canelo" fueron tímidos. Lo "mejor" del bajacaliforniano se vio en el octavo asalto, cuando impulsado por su esquina, logró acorralar a Álvarez contras las cuerdas.
Sin embargo, fuera de algunas combinaciones, no imptacó golpes de poder al cuerpo del jalisciense y en el siguiente capítulo se confirmaría que su repunte se debió más bien a una baja en la intensidad de "Canelo".
Álvarez, quien había prometido que se vería una guerra en el ring, controló el cotejo desde el inicio gracias a combinaciones 1-2 de izquierda-derecha, que no hallaban resistencia de parte de Angulo. El púgil jalisiciense lució muy cómodo a lo largo de la velada y tuvo un regreso muy a modo tras su derrota ante Floyd Myweather Jr.
El "Canelo" dejó su récord en 43-1.-1, con 31 triunfos por la vía del nocaut. Mientras que el récord de Angulo ahora es de 22 victorias (18 KO's) y cuatro derrotas.