Ocurrido en aguas internacionales en la madrugada del 31 de mayo de 2010, el ataque a la flotilla llamada "Gaza Freedom Flotila" se saldó con 10 activistas turcos muertos: nueve cuando un comando israelí asaltó de madrugada su buque insignia, el Mavi Marmara, y un décimo, víctima de las heridas sufridas.
"La información disponible ofrece una base razonable para creer que se cometieron crímenes de guerra a bordo del buque 'Mavi Marmara'", indicó la fiscal jefe, Fatou Bensouda, en un comunicado emitido este jueves.
Sin embargo, Besouda consideró que "los eventuales casos que pudieran derivarse de una investigación sobre este hecho no serían suficientemente graves para que el tribunal les dé seguimiento".
Los abogados de las Islas Comores, país que impulsó el caso ante el TPI y donde estaban precisamente registrados los navíos, denunciaron una decisión "política" y anunciaron su intención de recurrir "por todos los medios legales posibles".
Esta decisión "abre la vía a otros ataques contra futuras misiones pacíficas que transporten ayuda humanitaria a Gaza", lamentó uno de los letrados, Ramazan Aritürk, en rueda de prensa desde Estambul.