En un comunicado, el organismo señaló que la violencia, intensificada durante la última semana, ha dañado además la infraestructura básica del país, lo que incluye servicios de salud y educación, mientras la violencia y el desplazamiento aterrorizan a los menores de edad.
“Los niños están desesperadamente necesitados de protección, y todas las partes en conflicto deben hacer todo lo que esté a su alcance para mantenerlos a salvo”, dijo Julien Harneis, representante de UNICEF en Yemen.
De acuerdo con el organismo, la actual escalada de violencia y el rápido deterioro de la situación humanitaria han exacerbado las precarias condiciones para los infantes, con una inseguridad alimentaria, severa desnutrición y crecientes tasas de reclutamiento.
Señaló que trabaja con socios nacionales e internacionales para ofrecer asistencia básica a los niños en Yemen, lo que incluye agua y provisiones sanitarias y de salud, así como programas de nutrición, educativos y psicosociales, entre otros.
La declaración de UNICEF se suma a la evaluación realizada este martes por el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Raad al-Hussein, que apuntó que Yemen está “al borde del colapso”.
La violencia se intensificó en ese país luego de que milicias de la etnia houthi amenazaron con tomar el gobierno del país y de que, en días recientes, una ofensiva liderada por Arabia Saudita lanzó ataques aéreos en respaldo del presidente.