En un posicionamiento conjunto, 28 organizaciones de derechos humanos internacionales y latinoamericanas denuncian que Venezuela está intimidando y hostigando a defensores de derechos humanos bajo acusaciones infundas de que "estarían intentando desestabilizar la democracia en el país" sudamericano.
Las autoridades incluyen entre las acciones que ahora criminalizan, a muchas las funciones legítimas que ejercen estas organizaciones, como es la documentación de abusos y el representar a víctimas ante organismos internacionales de derechos humanos.
"Las autoridades venezolanas deberían desistir inmediatamente de esta táctica," demandaron las 28 organizaciones.
Los defensores internacionales piden a los gobiernos que participarán en la Cumbre de las Américas (en Panamá, el 10 y el 11 de abril próximos), "deberían exigir al gobierno de Nicolás Maduro que asegure que las defensoras y los defensores de derechos humanos puedan realizar su labor sin temor a sufrir represalias," dijeron las organizaciones.