El primer ministro, el teniente Isaac Zida, continúa "bajo arresto domiciliario", informó en un comunicado el consejo golpista, que también liberó a algunos ministros del Gobierno de transición.
La puesta en libertad de Kafando es una "muestra de apaciguamiento y de interés general", precisó el CND, después de que varias instituciones como Naciones Unidas o la Unión Africana exigieron en repetidas ocasiones la liberación del mandatario.
El pasado miércoles, la guardia presidencial irrumpió en el Consejo de Ministros y se llevó "como rehenes" a Kafando y a Zida, que posteriormente fueron trasladados a un campamento militar en la capital, Uagadugú.
Tras la liberación, el presidente del consejo golpista, el general Gilbert Diendéré, se reunirá con miembros de la comunidad internacional para dialogar y encontrar una solución "duradera y consensuada" a esta crisis.
Está previsto que Diendéré mantenga un encuentro este mediodía con el presidente de Senegal, Macky Sall, y de Benin, Thomas Boni Yayi, para abordar los últimos sucesos ocurridos en el país.
Ayer una facción del Ejército (la guardia presidencial) disolvió el Gobierno y proclamó a Diendéré, exjefe del Estado Mayor en el antiguo Gobierno de Blaise Campaoré -derrocado por una revuelta popular a finales del pasado año- como presidente del consejo golpista.
Poco después, los burkineses salieron a la calle para protestar contra el golpe y, durante las manifestaciones en la capital, al menos una persona murió y cerca de 60 resultaron heridas al ser tiroteadas por soldados.
El golpe de estado truncó la transición democrática en este país africano, que debía celebrar el próximo 11 de octubre elecciones presidenciales.