El grupo yihadista Estado Islámico (ISIS) ha amenazado con atacar las prisiones sauditas para liberar a sus detenidos, en respuesta a la ejecución de decenas de extremistas el sábado pasado en Arabia Saudita, que calificó de "chantaje".
"Los tiranos sauditas demostraron con esta acción su nueva política, que es concentrar a los monoteístas (en mención a los simpatizantes del ISIS) en las prisiones y convertirles en rehenes", según la editorial del semanario Al Naba, publicado en internet por el ISIS.
Los yihadistas afirmaron que de esta forma las autoridades sauditas quieren "responder a cualquiera amenaza de los muyahidines (guerreros santos) con la ejecución de los rehenes".
El editorial apuntó que para liberar a sus presos el camino es "derrocar a los regímenes que los detienen y luego destruir sus cárceles".
En este sentido, el grupo terrorista amenazó con destruir las cárceles de Al Hayer, a unos 25 kilómetros al sur de Riad, y Al Tarfiya, situado en la ciudad de Buraida, en las que la mayoría de los presos están condenados por delitos de terrorismo.
Al Hayer, una de las mayores prisiones de Arabia Saudita, con altos niveles de seguridad, fue blanco el pasado julio de un atentado suicida reivindicado por el ISIS.
Las autoridades saudíes ejecutaron el pasado día 2 a 47 personas, en su mayoría extremistas suníes sentenciados a muerte por su implicación en atentados perpetrados en el reino en 2004 y 2005.
El ISIS aseguró con anterioridad que liberaría a los presos, al tiempo que amenazó a Arabia Saudí, llamando a perpetrar ataques contra la familia gobernante Al Saud, las fuerzas de seguridad y los chiíes.