El gobernador de Florida, Rick Scott, declaró la emergencia sanitaria en cuatro condados del estado del sureste de Estados Unidos, que por su clima es territorio propicio para el mosquito Aedes aegypti, el vector de la enfermedad, que ha causado alarma en todo el mundo por haber sido vinculada a malformaciones en los bebés.
Scott emitió la orden ejecutiva luego de que este miércoles las autoridades sanitarias del estado reportaran seis nuevos casos de zika, lo que elevó a nueve el número de personas que han enfermado en el estado, todas ellas luego de regresar de viajes a países donde el virus está presente. Ninguna mujer embarazada se ha visto afectada.
La medida permitirá dirigir recursos para las zonas afectadas para combatir la enfermedad, principalmente con campañas de fumigación.
"Tenemos que asegurar que Florida esté preparada para la eventual propagación del virus del Zika por nuestro estado", dijo Scott en una nota de prensa.
Mientras, en el estado de Georgia (sureste) se reportó este miércoles un primer caso de zika, en una persona que viajó entre diciembre y enero a Colombia. La persona ya se recuperó, según el Departamento de Salud estatal.
En Estados Unidos se han registrado varias decenas de casos de zika, todos importados.
El zika preocupa a las autoridades sanitarias a nivel mundial por la veloz propagación por América Latina del virus, aparentemente inofensivo pero que ha sido ligado a un anormal aumento de casos de microcefalia en Brasil.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el lunes alerta sanitaria mundial por el posible vínculo entre el contagio de zika en mujeres embarazadas y el aumento de casos de la malformación en los bebés.