Las autoridades implementaron un operativo de rescate durante el cual se registró la explosión, según la agencia estatal de noticias RIA Novisti.
El ministro de Situaciones de Emergencia de Rusia, Vladimir Puchkov, admitió que no había prácticamente ninguna posibilidad de supervivencia para cualquiera de los 26 mineros, quienes habían quedado atrapados desde el jueves en la mina de carbón Severnaya, de la ciudad de Vorkuta.
Ese día, una fuga repentina de gas metano causó dos explosiones a una profundidad de 780 metros que, a su vez, provocaron un derrumbe y un incendio.
Cuatro mineros murieron y 81 lograron sobrevivir, pero 26 quedaron atrapados, según las autoridades.
La madrugada de ayer domingo, cuando estaba en curso el operativo de rescate, se produjo una tercera explosión, informó la prensa estatal. Esa explosión mató a cinco rescatistas y a un minero más.
Puchkov dijo a la prensa que la explosión ocurrió en la zona donde estaban atrapados los mineros. Las altas temperaturas y la falta de oxígeno en esa parte de la mina hacían imposible la supervivencia, aseguró el funcionario.
En la República de Komi, la región polar de Rusia donde está la mina, se han declarado tres días de duelo en memoria de las víctimas de la tragedia.
La mina se localiza a más de 100 kilómetros al norte del círculo polar, en Vorkuta, en la república de Komis.
Conocida por sus condiciones climáticas extremas, Vorkuta fue un gulag por el que pasaron decenas de miles de presos, obligados a trabajar en las minas. Al cerrarse el gulag en la década de 1950, continuó la explotación minera.