"Si se descubre que este ataque obsceno tenía como blanco deliberado una estructura civil, podría constituir un crimen de guerra", dijo O'Brien. Al menos 28 civiles incluyendo mujeres y niños murieron en los bombardeos aéreos en el campo cerca de Sarmada en la provincia de Idleb, donde habían buscado refugio familias que habían huido de los enfrentamientos sangrientos en la región vecina de Alepo."Estoy horrorizado y asqueado por la noticia de civiles muertos hoy por bombardeos aéreos en dos asentamientos donde personas desplazadas buscaban un santuario", dijo O'Brien.