De las 120 víctimas mortales, 53 ocurrieron en las localidades de Accumoli y Amatrice, en la provincia de Rieti, en la región central de Lazio, en tanto otras 20 en el municipio de Arquata del Tronto, en la región de las Marcas.
Al menos dos mil personas han quedado sin hogar, según Protección Civil, que estima que el número de fallecidos podría elevarse.
La actualización del balance de víctimas fue dada a conocer por el propio primer ministro italiano, después de realizar un recorrido por la zona devastada, que se ubica en una zona de alta sismicidad.
"Es posible que el número de víctimas crezca", advirtió el jefe de gobierno italiano, quien recorrió la zona afectada en las horas de la tarde y prometió ayuda para las familias damnificadas.
Según fuentes de prensa al menos cien personas siguen sin aparecer y probablemente han quedado sepultadas vivas y unas 2,000 resultaron damnificadas.
Entre las víctimas figuran muchos niños, así como una familia entera, padre, madre y dos hijos, que por horas los socorristas intentaron salvar.
Uno de los pueblos más afectados de esta zona montañosa y poco poblada es Amatrice, de unos dos mil 600 habitantes.
Los habitantes de las localidades más afectadas se preparaban a pasar su primera noche a la intemperie, mientras las autoridades disponían los cuerpos en parques y jardines cubiertos por mantas y sábanas improvisadas.
Socorristas, policías y voluntarios trabajan en las pequeñas localidades de Amatrice y Accumoli, en la región del Lacio, y Arquata del Tronto, en la región de Marcas, las tres más afectadas por el movimiento telúrico, para buscar personas entre los escombros.
En Amatrice, una de las localidades más afectadas, continúan las labores de rescate, en las que participan militares, carabineros, patrullas de montaña y personal médico.
Más de 100 réplicas, la más alta de 4.9 grados Richter, se han registrado a raíz del terremoto.
Italia se encuentra situada entre dos fallas y esto la convierte en una de las zonas más activas sísmicamente de Europa. En esta región chocan las placas continentales africana y euroasiática y entra, además, por debajo la placa adriática.