Los inmigrantes beneficiados por esta medida tienen que tener algún familiar en el país que pueda acogerlos y comprometerse a reportarse de manera periódica con las autoridades de inmigración.
Según fuentes de los propios inmigrantes liberados con este procedimiento en la zona de El Paso (Texas), antes de poder salir de los centros de detención tienen que proporcionar al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) los datos de sus familiares y firmar un documento en el que dicen entender y aceptar la medida precautoria.
Estas tobilleras utilizan un sistema de rastreo por satélite que determina el paradero del inmigrante durante su proceso legal, según las autoridades migratorias.
Los indocumentados, que en su mayoría son de Honduras, Guatemala y El Salvador, consideran que llevar las tobilleras es mejor que estar recluido en un centro de detención.