Según el estudio de la organización Overseas Development Institute (ODI), con sede en Londres, el 15 por ciento de los niños de entre 6 y 14 años de los barrios más miserables de la capital no van a la escuela, sino que trabajan a tiempo completo. Esa cifra sube al 50 por ciento a la edad de 14 años.
Dos tercios de las niñas que trabajan, interrogadas por los investigadores del ODI, están en el sector textil, que representa 30 mil millones de dólares en la economía de Bangladesh, en plena expansión.
La coautora del informe, Maria Quattri, indicó que muchos menores quieren ir a la escuela pero "la pobreza empuja a los padres a buscar empleo para sus hijos, aunque saben que eso pone en peligro su futuro a largo plazo".
El responsable de un taller textil, no identificado, reconoció, según el texto, que había niños de entre 11 y 14 años de edad en sus instalaciones, pero no consideraba que eso fuera ilegal.
Ni las autoridades bangladesíes ni la industria textil hicieron ningún comentario. Según responsables sindicales, el trabajo infantil está muy extendido en las fábricas del país.